Este fin de semana, Alberto Núñez Feijóo se dio un festín de popularidad en el acto que ha abierto el curso político para el principal partido de la oposición. En tierras pontevedresas, antes de su intervención, habló su sucesor al frente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, quien hizo balance de los años de Gobierno del de Os Peares para, fundamentalmente, ensalzar su figura.

Para ello, a la hora de elogiar las políticas de Feijóo al frente de la administración autonómica, no dudó ni un instante para alabar la gestión en algunas materias que, como en el caso de la sanidad pública, chocan con el “caos” y el descontrol que, según sindicatos, colectivos de usuarios y entidades de profesionales de medicina y enfermería, domina tanto en el ámbito de las urgencias hospitalarias como en la Atención Primaria.

También puso por las nubes Rueda el uso del “sentidiño” en el caso de la pandemia. Presumió de las medidas llevadas a cabo, pero obviando una serie de factores que, tal y como han indicado expertos en Salud Pública, han sido determinantes para la menor incidencia del covid-19 en la región. Entre otras la dispersión de la población.

La hostelería también era uno de los factores que animaron a los líderes del PP para presumir de gestión. Sin embargo, a tenor de la denuncia que ha realizado esto días la Asociación Empresarial do Aloxamento, Restauración e Turismo de Santiago e Comarcas, no todo es un camino de rosas.

Estos profesionales, en comparecencia ante los medios de comunicación, informaron del inicio del procedimiento de reintegro que este mes de agosto ha puesto en marcha la Xunta de Galicia. El mismo afecta a las ayudas concedidas a los locales de ocio nocturno en septiembre de 2021.

Este cambio del Ejecutivo con respecto a estas subvenciones concedidas a los establecimientos que no podían realizar su actividad a causa de la pandemia, “carece de base legal y obedece a una interpretación equivocada de la Orden” que otorgó las mencionadas ayudas.

El presidente de esta asociación empresarial, Lois Lopes, fue más allá al lamentar que detrás de esto hay una “intencionalidad política”, algo que enmarco en un “ataque sistemático al sector”.

Tal y como explicaron desde este colectivo, de los cerca de 4 millones de euros de crédito, el Gobierno presidido por Alfonso Rueda reclama el reintegro de alrededor de 2,4 millones de euros, es decir, casi el 60% del total. En algunos supuestos la cantidad a devolver puede alcanzar los 30.000 euros, a lo que se tiene que sumar el interés generado en estos 11 meses.

Más de 300 empresas afectadas

La Asociación argumenta que es erroneo lo que señala la administración autonómica. Según esta no se cumple la Orden del 15 de agosto de 2020 según la cual se impedía a los establecimientos de ocio nocturno ejercer cualquier tipo de actividad, dado que estos negocios sí reflejaron que habían tenido facturación en los dos primeros trimestres de 2021.

Tal y como aclararon, sin embargo, la clave se encuentra en que esta Orden no tiene vigencia en ese período del año pasado y otra Orden, esta vez del 10 de septiembre de 2021, sí permitía a estos locales trabajar la terraza teniendo siempre en cuenta las restricciones vigentes en cada momento.

Contra el procedimiento iniciado ahora por la Xunta la Asociación presentó ya alegaciones con la esperanza de que “como en anteriores ocasiones” prosperen y se evite un daño mayor a un sector especialmente castigado.

De la importancia que tiene el procedimiento iniciado por el Ejecutivo gallego habla el hecho de que, de seguir adelante, afectaría a más de 300 empresas, es decir, “el 50 o 60% del total de hosteleros de ocio nocturno” del conjunto de toda la región, señaló Lopes.

Con el objetivo de tratar de resolver este asunto y “trasladar de primera mano la inquietud del sector” estos empresarios han solicitado ya una reunión al vicepresidente segundo de la Xunta y conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo.