Galicia no está siendo ajena a la polémica por el precio de la electricidad y el papel que las operadoras juegan en el proceso comercializador. Al margen de otras consideraciones, ahora mismo en la región se habla del vaciado registrado en algunos embalses, en concreto en cuatro de ellos situados en las provincias de Ourense y Lugo.

Según informó la Consellería de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, todos son competencia de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, un dato importante en el cruce de declaraciones que se ha producido en las últimas horas con acusaciones del Gobierno autonómico hacia el central y críticas desde la oposición regional a la actitud mantenida por el PP de Galicia y la Xunta.

A raíz de esto, la Consellería anunció la incoación de un expediente sancionador a las empresas concesionarias que llevaron a cabo el vaciado de dichos embalses se Cenza, As Portas, Salas y Belesar. Tal y como explicó en un comunicado la intención es imponerles la “sanción máxima prevista en la ley” debido a que la acción efectuada por las compañías es “susceptible de afectar a la fauna piscícola”.

El departamento autonómico señaló que el desagüe se realizó “sin que el servicio provincial correspondiente pudiera fijar las medidas preventivas oportunas".

El propósito final de la Xunta, según dejó claro la Consellería, es “depurar responsabilidades por el vaciado realizado sin autorización” en estos enclaves pertenecientes a la cuenca Miño-Sil, unos hechos, “en todo caso, no imputables de ninguna manera a la acción del Gobierno” que preside Alberto Núñez Feijóo.

Precisamente, en el marco de esta controversia, los 'populares' gallegos han aprovechado para arremeter contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Hoy mismo han anunciado la elevación de varias preguntas en el Senado dirigidas a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera. El propósito de las mismas es obtener explicaciones acerca del vaciado de los citados embalses.

La Xunta estaba informada

En concreto, entre otras cuestiones, la senadora por Galicia Pilar Rojo pregunta por si hubo o no autorización para realizar esos desagües por parte de la Confederación Hidrográfica y cuáles “son las razones por las que Ejecutivo central lo consistió en pleno mes de agosto”.

Sin embargo, los últimos movimientos de la Xunta y del PPdeG parecen responder a las afirmaciones realizadas por el viceportavoz del Grupo Socialista, Pablo Arangüena, que este domingo llegó a calificar como “tomadura de pelo a la ciudadanía” lo realizado por la Xunta con respecto al vaciado de los embalses, al tiempo que le exigió que “asuma sus responsabilidades”.

El dirigente socialista habló de “mentiras y la inacción del señor Feijóo con este tema son muy graves”, en relación con que el presidente gallego aseguró el jueves pasado, según recordó, que “las compañías no informaron a la Xunta sobre el vaciado” y cuando “al día siguiente se publicaron correos electrónicos que demuestran que lo contrario” y que, por lo tanto, “mintió”.

También agregó que la propia compañía Iberdrola, según esas comunicaciones publicadas por Eldiario.es, notificó al Gobierno gallego a través del servicio de Conservación de la Naturaleza de la Xunta los días 10 y 12 de julio “su intención” llevar a cabo vaciados en los embalses de Cenza e As Portas.

En palabras de Arangüena, “la Xunta sabe desde el minuto cero que tiene las competencias, los medios y la obligación de actuar”.