Las versiones son contrapuestas y excluyentes, pero el problema político lo tiene el Ayuntamiento de Sevilla, no la empresa organizadora del evento. La Carrera de la Mujer 2017, prevista para este domingo, fue suspendida in extremis "por una decisión exclusiva de la empresa privada, que es la única responsable de que se cumplan las adecuadas medidas de seguridad y movilidad, así como de que se garantice la adecuación a la normativa de ocupación del espacio público".
Esa es la versión del gobierno local que dirige el socialista Juan Espadas, que admite que en esta edición los requisitos de seguridad habían sido más severos que en años anteriores debido a la situación de alerta antiterrorista, pero insiste que en ningún momento prohibieron la celebración de la carrera. Ahora bien, añade la versión oficial, los trámites no cumplimentados podían derivar en sanciones o denuncias a la empresa.
Iba a ser la duodécima edición de la Carrera de la Mujer Central Lechera Asturiana de Sevilla y había batido récord de participación: 14.000 mujeres, 2.000 más que en el año pasado y 4.000 más que 2015.
La versión de la empresa
La versión de la organizadora, Motorpress Ibérica, es muy distinta a la oficial. La empresa, que devolverá a las participantes la cuota aportada, arrancaba así su comunicado público: “Después de 14 años y más de 100 pruebas celebradas en toda España para promocionar el deporte femenino, la lucha contra el cáncer de mama y la violencia de género, hoy ha sido el día más triste de la Carrera de la Mujer. El Ayuntamiento de Sevilla ha impedido dar la salida de la Carrera de la Mujer 2017, con 14.000 participantes ya preparadas para celebrar uno de los mayores festivales del deporte femenino en Europa”.
En su comunicado, la empresa afirma también: “Queremos dejar muy claro que desde el viernes por la tarde está en poder del Ayuntamiento absolutamente toda la documentación correcta para la celebración del evento”.
La versión municipal
Según el Ayuntamiento, aunque "se ha trabajado hasta el último momento y el dispositivo municipal estaba preparado desde todas las áreas municipales, y así se le comunicó a la organización", en los últimos días se trasladaron a la empresa promotora del evento diversos avisos alertándola de que "no había cumplido" con los requisitos exigidos en materia de seguridad, movilidad y ocupación del espacio público sin los cuales no habría autorización por parte de la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores.
"En la inspección realizada en la mañana de este sábado, y tal y como se les había advertido, se les comunicó que el dispositivo estaba preparado para la realización de la carrera pero que se mantenían incumplimientos administrativos en cuanto a la documentación y las autorizaciones necesarias para la celebración de un evento de estas características", informaba el gobierno local en un comunicado que dejaba, no obstante, algunos interrogantes en el aire.
Según el Ayuntamiento, "ante ese aviso, y de forma imprevista, la organización anunció la suspensión del evento al negarse a asumir cualquier tipo de responsabilidad administrativa que pudiera derivar".
La oposición pide cabezas
La oposición en pleno, que no ha hecho ningún reproche a la empresa organizadora, ha exigido responsabilidades al equipo de gobierno en particular del concejal delegado de Seguridad, Juan Carlos Cabrera y del delegado de Deportes, David Guevara.
Para la “perpleja” portavoz municipal adjunta de IU en Sevilla, Eva Oliva, ha habido "incompetencia" del gobierno de Juan Espadas y una "incapacidad absoluta" para garantizar la seguridad. Oliva reclama el cese inmediato de Juan Carlos Cabrera.
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos (en el Ayuntamiento de Sevilla, Javier Millán, piensa solicitar la celebración de un Consejo Extraordinario del Instituto Municipal de Deportes “para depurar responsabilidades". Millán se preguntó cómo era posible que el delegado de Deportes presentara la carrera el jueves en el propio Ayuntamiento aun sabiendo “que la carecía de permisos".
A su vez, la portavoz adjunta del PP, María del Mar Sánchez Estrella, quiere saber qué ha pasado exactamente y se pregunta por qué el Ayuntamiento no envió el día anterior un comunicado advirtiendo de su cancelación.
