“¿Qué parte de la abstención no han entendido?”, se preguntaba anoche con sorna aunque bastante enfadado un diputado socialista consultado por EL PLURAL.COM sobre la ofensiva de los ocho barones regionales cercanos a Pedro Sánchez que ayer enviaron una carta al presidente de la Gestora, Javier Fernández, reclamando una abstención parcial del Grupo Parlamentario en la sesión de investidura de Mariano Rajoy.

Otro dirigente del PSOE andaluz veía detrás de esa carta la mano del ex secretario general Pedro Sánchez y se hacía por cuenta esta reflexión: “¿Abstención técnica? ¡Ni muerto! Lo aprobado es lo aprobado, pero algunos parece que quieren sacarle las castañas del fuego a Pedro Sánchez, que así podría ponerse a recorrer toda España defendiendo el no. Si no se respetan las decisiones tomadas decmoráticamente, estamos perdidos”.

Mientras, el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, dejaba ayer bien clara la posición oficial del socialismo andaluz, cuya Ejecutiva Regional se reunía sin discrepancias bajo la presidencia de Susana Díaz: el acuerdo adoptado en el Comité Federal "es de obligado cumplimiento". Descartada, pues, la abstención técnica que reclaman los ahora llamados críticos.

'Vosotros también lo hicisteis'

Cornejo, tras mostrarse confiando en que el PSC asumirá finalmente el acuerdo de ese Comité Federal “donde también ha participado", tiró de hemeroteca para defender la abstención ante Rajoy: "Ya ocurrió lo mismo cuando el PSC votó la abstención para hacer presidente a Artur Mas".

Fue el 23 diciembre de 2010. Artur Mas fue investido presidente de la Generalitat con los votos de Convergència i Unió y la abstención del Partit dels Socialistes de Catalunya: 62 votos a favor, 45 en contra y 28 abstenciones. Sobre el papel, el acuerdo garantizaba un papel importante al PSC en los grandes asuntos de la legislatura catalana. De hecho, el modo en que ayer Rajoy agradeció la responsabilidad demostrada por el PSOE al virar hacia la abstención no es muy distinto del exhibido por Artur Mas hacia el entonces líder del PSC José Montilla, a quien el president agradeció su "alto sentido institucional". Los parecidos no acaban ahí. Artur Mas también dijo entonces: "No es un acuerdo de gobernabilidad y no garantiza la estabilidad para estos cuatro años”.

El número dos de los socialistas andaluces recordó todo eso ayer: "Se dijo que fue por responsabilidad, porque no se puede bloquear que haya un gobierno, que se hizo con un proyecto totalmente diferente y sin acuerdo, y nosotros tampoco tenemos un acuerdo con el PP, no estamos pactando nada, estamos siendo responsables y desbloqueando la situación por el interés general y por el interés de todos los españoles, para al día siguiente hacer una oposición contundente".

Cornejo volvió a defender la abstención en bloque: es lo que aprobó el Comité Federal y es de obligado cumplimiento. Y punto, le faltó decir. Y añadió, en relación al PSC: "Yo personalmente nunca iría a una votación para no obedecer una decisión de los órganos del partido".

Los del 'no' se pasan a la abstención parcial

Llamando al PSC a que recapacite y convencido de que lo hará y cumplirá con el mandato del órgano, el dirigente andaluz, preguntado por la posibilidad de una abstención técnica, señalaba con malicia que "curiosamente defienden esta postura quienes antes estaban en el 'no' a Rajoy", y recalcó que si el PSOE toma una decisión "es para que todos la cumplan".

Cornejo menció también el verbo favorito del PSOE-A: "Hay que coser" el partido tras haber afrontado "un debate intenso y profundo; ahora toca convencer, dialogar y hablar para que todos comprendan que lo que ha pensado la mayoría del Comité Federal lo hace con responsabilidad".

De esta manera, ha explicado que votarán no a Mariano Rajoy en la primera votación de la investidura "porque no estamos de acuerdo con sus políticas", mientras se abstendrán en la segunda para "desbloquear la situación" pero "manteniendo los principios y la voluntad de pelear los compromisos que tenemos con los ciudadanos".