El problema del Sáhara lleva cuatro décadas sin permitir la evolución de su población, y se ha convertido en un foco de inestabilidad e inseguridad en la región norteafricana. Todo comenzó en los años 70 como una lucha contra la colonización española, siguiendo la ola descolonizadora que recorría varios continentes. Las tropas españolas comenzaron a retirarse del espacio (más tarde de lo prometido), y aprovechando el vacío de poder, Marruecos y Mauritania trataron de ocuparlo. Decenas de miles de saharauis huyeron a Argelia y se ubicaron en campos de refugiados en mitad del desierto, de donde todavía no se han podido marchar hoy. Mauritania terminaría reconociendo la autonomía del Sáhara, pero no así Marruecos, ante el que se levantaría el Frente Polisario, hasta que ambas partes firmaron el alto el fuego en 1991 por impulso de la ONU. Con todo, al final de la guerra, Marruecos pasó a controlar un 80% del territorio del Sahara Occidental, lo que incluye casi todas las zonas pobladas y los ricos caladeros de pesca.

Un referendum que no llega

Marruecos levantó, además, una barrera de más de 2.200 kilómetros para separar ambos territorios. El acuerdo estipulaba la creación de un censo para celebrar un referendum en el que los saharauis puedan elegir entre la integración en Marruecos o la independencia. Los saharauis siguen esperando ese censo, después de que varias intentonas de la ONU por realizarlo le hayan resultado inaceptables a Marruecos. Son muchas las iniciativas que se han puesto en marcha en nuestro país para reclamar una solución ante el conflicto del Sáhara, y acaba de nacer otra: un grupo de 17 periodistas radiofónicos, que apoyan la causa saharaui, ha lanzado el proyecto Un Micro para el Sáhara, para “dar voz al pueblo saharaui”, indican en su web, “así como ayudar a que ellos conozcan ciertas herramientas en las que apoyarse para luchar por un Sahara Libre”, añaden.

Talleres de radio

Para ello van a realizar un viaje entre el 7 y el 17 de octubre a los campamentos de refugiados de Tinduf, donde desde hace más de 40 años viven miles de refugiados saharauis, con el fin de desarrollar talleres de comunicación tanto para los profesionales de la Radio Televisión Nacional Saharaui, para el que también se prevé abastecer con material de apoyo, como para los ciudadanos. Documentarán y grabrán todo el proceso para contar, a su vuelta, “historias que ocurren en medio del desierto”, relatan. Entre los profesionales de la radio que ya han expresado su apoyo a esta causa, Ángel Carmona, director de Hoy Empieza Todo en Radio 3; Amaya Prieto, directora de Viaje al Centro de la Noche en RNE y Javier Hernández, subdirector de El Canto del Grillo de RNE.