La jornada electoral vasca ha concluido con total normalidad, y las encuestas no han estado desencaminadas en sus previsiones. Al menos, en una de las principales: el poco éxito y apoyo de la derecha nacional en el País Vasco. Tras el escrutinio, la suma entre el PP y Vox ha sido de unos 96.000 votos, que se traducirán en 8 escaños, 7 para el PP y 1 para Vox. Ni Javier de Andrés ni Amaia Martínez han sido capaces de vender una propuesta política que entusiasmara a los vascos, que han barrido para casa y han optado, mayoritariamente, por sus dos partidos regionalistas. En la zona media, como tercera fuerza, ha quedado el PSE-EE de Eneko Andueza, con unos 12 escaños que pueden ser claves para la formación de gobierno.

Los últimos sondeos del CIS apuntaban a un triunfo de EH Bildu con una horquilla de entre el 34,2% y el 35,1% de los votos, superando ligeramente al PNV, que recibiría entre el 32,6% y el 33,5%. Los resultados finales se han invertido: 32,6% para los abertzales y 35,2% para los jeltzales, dejando un empate a 27 escaños. La citada encuesta también dibujaba horizontes complicados para la derecha y la extrema derecha nacionales, que cifraba sus apoyos en un 8,2% y un 2%, respectivamente, y que no se ha quedado muy lejos de lo que han decidido los vascos que han acudido a votar: 9,1% para el PP y 1,9% para Vox.

De Andrés, en declaraciones a los medios de comunicación tras votar en un colegio electoral de Vitoria-Gasteiz, animó a la participación y confió en el respaldo de la sociedad vasca. "Confiamos en tener el respaldo de muchos vascos para lograr ser decisivos en la próxima legislatura, porque es necesaria la centralidad que nosotros aportamos en el Parlamento Vasco", argumentó.

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La candidata de Vox, por su parte, llamó al "voto valiente y patriótico", y aseguró que "era posible construir un País Vasco sin separatismos". "Quiero agradecer la labor de funcionarios y policías para que estas elecciones al Parlamento Vasco se desarrollen de forma libre. Esperamos que sea un día en el que la alegría y la esperanza brillen, porque consideramos que es posible un país sin el yugo del separatismo", expresó. Ninguno de estos dos discursos post-depósito de papeleta han surtido el efecto esperado para ellos, en una región en la que han tenido dificultades históricamente para hacer calar sus idearios. 

Cabe destacar, por otra parte, que el PP ha tenido como uno de los elementos centrales de su discurso en campaña una de sus cartas más recurrentes: la de ETA. En este sentido, el presidente de la formación, Alberto Núñez Feijóo, pidió en el último mítin que "se refleje en las urnas" lo que a su juicio es una "tomadura de pelo a los vascos" en que el PNV y el PSE-EE critiquien que EH Bildu no quiera calificar a ETA de organización terrorista, pero que ello no les sea un impedimento para futuros pactos. Una receta sin demasiado fundamento en un territorio en el que la izquierda abertzale está completamente naturalizada e integrada en el espectro político.

¿Cuántos vascos han estado llamados a votar y cuál ha sido la participación?

1.795.206 vascos han sido llamados a las urnas en estas elecciones, de los cuales unos 915.000, el 51%, según el último dato de participación, ha ejercido su derecho a voto, registrando un dato mayor que en las últimas elecciones, que se celebraron en plena pandemia del Covid-19.

En las anteriores elecciones, celebradas en 2020, fueron 888.733 los vascos que ejercieron su derecho a voto, algo menos del 50% de los electores con esta capacidad. En cuanto al voto por correo, Correos ha lanzado un comunicado anunciando que han sido 57.726 las solicitudes para votar a distancia en estos comicios, 51.244 de ellas presentadas de forma presencial y las 6.482 restantes a través de la web.

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