El camino hacia la igualdad es largo y tortuoso. Puede parecer que se ha avanzado mucho. Pero de pronto, hay una nueva piedra en el camino. Donde menos te lo esperas surge una nueva disputa, polémica o situación discriminante. ¿Quién iba a pesar por ejemplo, que la última iba a surgir en Google?

El ingeniero ocioso de Google

Resulta que uno de sus ingenieros, James Damore, se entretuvo en redactar un documento de 10 páginas en contra de lo que se denomina diversidad. En el texto denunciaba la imposición de las políticas de igualdad en el seño de Google. Defendía diferencias entre hombres y mujeres a la hora de desarrollar distintas tareas. Damore, decía por ejemplo, que los hombres son más agresivos para alcanzar cierto estatus. Y que las mujeres se estresan cuando piden un aumento. Y después comienza a dar una serie de argumentos según los cuales, las mujeres están menos dotadas para trabajar en aspectos relacionados con la ingeniería. Qué llevo a Damore a eregirse en experto en comportamiento humano es una incógnita. Según qué datos y estudios extrajo sus conclusiones también es un aspecto no explicado en su documento. Pero realmente no hace falta más que una mente muy corta para exponer máximas manidas y absurdas como que las mujeres están más dotadas “para trabajos relacionados en áreas sociales y artísticas”, mientras que los hombres están más dotados para la programación por “su pensamiento sistemático”.

Final previsible

Lo que en principio era un documento para el personal interno de la empresa, lógicamente se escapó de ese entorno. Y generó una gran crisis corporativa en una compañía que hace bandera de la igualdad y la lucha contra la discriminación. Danielle Brown, vicepresidenta de Diversidad, redactó una nota en la que aseguraba que esas opiniones en absoluto eran reflejo de la política de Google, donde la “diversidad y la inclusión con valores fundamentales”. Al final el asunto ha terminado como cabía esperar. El ingeniero metido a sociólogo ha sido despedido por la compañía tecnológica. El motivo es “perpetuar estereotipos de género que no se corresponden con la realidad”. Igual podrían haber recomendado a Damore emplear tanto conocimiento sistemático sobre ingeniería para reprogramarse y actualizarse un poco.