A finales de 2012 el Gobierno dijo que ya se veía "la luz al final del túnel" de la crisis gracias a las duras medidas tomadas por el Gobierno de Rajoy: subida brutal de impuestos, reforma laboral, un recorte de 8.000 millones de euros para educación y sanidad y luego el mega recorte de 75.000 millones para todo en general. En 2013 todo el Gobierno y todo el PP aseguraron que ya estábamos saliendo de la crisis y el año pasado proclamaron que la crisis había terminado a pesar de tener una tasa del paro del 25%. El Instituto Nacional de Estadística ha publicado los datos definitivos después de revisar las cifras y confirma lo que sabíamos los ciudadanos, la recesión fue mucho peor.

Los datos
El INE ha desvelado que la caída del PIB durante esos tres años fue entre cuatro y cinco décimas más estrepitosa de  la estadística oficial del Ministerio de Economía. El producto interior bruto (PIB) se dejó un 1 % de su valor en el 2011 y no un 0,6 % como se dijo al finalizar ese primer año negro. Lo peor fue en 2012 con una caída  del 2,6 %, cuando hasta ayer se pensaba que era del 2,1 %. Y en el 2013 se contrajo un 1,7 %, también cinco décimas más grave de lo apuntado en principio.

¿Y 2014?
El Gobierno afirma que en 2014 la economía volvió a crecer después de tres años en negativo. Lo que está por ver es cuanto en realidad, porque de momento Estadística no ha revisado el dato del 2014. En febrero adelantó que el avance había sido del 1,4 % y en esa cifra lo mantiene. Aunque, eso sí, con un menor empuje de la demanda interna de lo que calculó en principio y un mejor comportamiento de las exportación de lo que se creía hasta ayer.

Gracias a Rajoy y no al sacrificio ciudadano
A esa revisión de las cifras se agarró ayer el ministro Luis de Guindos para proclamar en el Congreso -donde se debatían las enmiendas a las cuentas del 2016- que la crisis ha sido más «grave, dolora e intensa» de lo que se creía, para deslizar inmediatamente después, como quien no quiere la cosa, que el cambio de rumbo que se ha producido en estos últimos años «no tiene parangón». Según él gracias a los 'milagros' del PP y no al sacrificio de los ciudadanos.