El Gran Wyoming abría El Intermedio de este miércoles reflexionando sobre lo ocurrido en la Primera Semifinal de Eurovisión 2024 con la censura de la organización a las muestras de apoyo a Palestina. Y es que, la noche de antes, la Unión Europea de Radiodifusión (UER) emitía un comunicado en contra del gesto del cantante sueco Eric Saade, que llevaba un pañuelo palestino en su muñeca durante la actuación. Además, la representante de Irlanda aseguraba que habían vetado parte de su maquillaje al incluir mensajes pro palestina en su cuerpo.
Lo cierto es que, en esta edición, la UER ha prohibido la entrada al Malmö Arena con toda bandera que sea la de un país no participante y, por lo tanto, la de Palestina. Sin embargo, no existe ninguna orden explícita en cuanto a otras simbologías, como puede ser el pañuelo lucido por Saade. Wyoming comenzaba su discurso haciendo gala de su habitual ironía: "Ya ven qué cosas. No lo entiendo, yo creía que se podían llevar complementos. Nosotros un año salimos con una guitarra de plástico y no molestó a nadie. Al menos hasta que el Chikilicuatre empezó a cantar, claro".
Para continuar, el presentador de laSexta hacía referencia al comunicado emitido por la corporación tras la Primera Semifinal del martes, condenando el gesto del artista sueco: "La Unión Europea de Radiodifusión (UER), la responsable del concurso, ha emitido un comunicado lamentando lo ocurrido y asegurando que Saade ha comprometido lo que ellos llaman el 'carácter apolítico' del evento. Eso es una prenda que en Palestina la lleva todo el mundo, es una prenda de vestir. Pues se ve que los cantantes de Eurovisión pueden subirse al escenario con lentejuelas, pero no con principios", atizaba.
Entonces, Wyoming reflexionaba sobre la situación que se vive en la Franja de Gaza desde el mes de octubre, momento en el que Israel comenzó su asedio: "Parece que con la masacre de Gaza hay que medir muy bien las palabras y los actos. Hoy por ejemplo, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha enviado una carta a las empresas españolas que trabajan en Israel para pedirles que no colaboren involuntariamente con el genocidio en Gaza. Y ha usado precisamente esa palabra: genocidio, que parecía que se estaba aproximando a lo que está ocurriendo. La embajada de Israel no ha tardado en enviar un comunicado en el que rechaza lo que ellos llaman la falsa acusación de ministros intelectuales y medios de que Israel está cometiendo un genocidio y aseguran que esto demoniza a Israel e incita al odio y al antisemitismo".
Sin morderse la lengua, el comunicador hacía su propia valoración y mandaba un contundente mensaje a la embajada israelí: "No voy a ser yo quien lleve la contraria a la embajada, pero lo que demoniza a Israel no es la carta de un ministro, son sus intolerables actos en la Franja de Gaza. Condenar esta matanza no es ser antisemita, apoyar al pueblo palestino no es estar al lado de los terroristas, como insiste el Gobierno israelí permanentemente. Denunciar este genocidio, que ya se ha cobrado más de 30.000 vidas, no es propaganda política como aseguran en Eurovisión, es ponerte al lado de las víctimas, en contra de los verdugos. Y sentir compasión de un pueblo al que están aniquilando".
Antes de finalizar su discurso, Wyoming sacaba un pañuelo palestino y se lo ponía por encima antes de volver a utilizar su tono irónico: "En fin, voy a ponerme esto que tengo un poco de fresquito. Para que no se olvide, estos gestos son francamente necesarios, hasta los más pequeños. Sé que me estoy arriesgando, pero me da igual, que esto me cierre las puertas de Eurovisión, pues bueno. De hecho, yo ya estaba vetado en el concurso por un hecho que nunca me perdonarán: cantar como el culo".
Wyoming, a la embajada israelí: "Lo que demoniza a Israel no es la carta de un ministro, son sus intolerables actos en Gaza" https://t.co/Gr6Gz3VmTi
— El Intermedio (@El_Intermedio) May 8, 2024
La censura de la UER en la Primera Semifinal de Eurovisión
El pasado martes 7 de mayo, el Malmö Arena acogía la Primera Semifinal de Eurovisión 2024. Eric Saade, representante de Suecia en el Festival de Eurovisión 2011, fue uno de los encargados de abrir la gala junto a Eleni Foureira y Chanel. Sin embargo, su actuación no pasó por desapercibida, y es que, el cantante -cuyo padre es libanés de origen palestino- lució un pañuelo palestino -denominado kufiya o keffiyeh- en su muñeca como parte de su vestuario.
Una vez finalizada la gala, la UER criticaba el gesto del cantante en un comunicado lanzado por la televisión sueca SVT. "Nos parece triste que utilice su participación de esta manera", afirma Ebba Adielsson, productora ejecutiva del Festival de Eurovisión 2024, en un mensaje de texto a Aftonbladet. En este escrito, la organización añade que "Eurovisión es un programa en directo": "Todos los artistas son informados de las bases del concurso. Lamentamos que Eric Saade haya optado por ignorar el carácter apolítico del evento".
Por otro lado, Bambie Thug, representante de Irlanda, aseguraba ante la prensa, tras la gala, que fue censurada por la UER antes de su show, en el que iba a lucir un maquillaje en su cuerpo con mensajes en favor de Palestina y del alto al fuego en Gaza. En su comparecencia, Thug respondió sobre las inscripciones que se pudieron ver en su cuerpo, durante los ensayos, en una antigua lengua celta denominada Ogham. En ellas, se podía leer mensajes como “alto al fuego” y “libertad para Palestina”, sin embargo, estas palabras no pudieron verse en la Semifinal. La artista levantaba la voz contra la censura sufrida por parte de la organización: "Soy una persona a favor de la libertad y de la justicia, pero desafortunadamente tuve que cambiar esos mensajes hoy, dejando solo 'coronad a la bruja' (uno de los lemas de su canción) por orden de la UER", se lamentaba.
Síguenos en WhatsApp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes
