La derecha ha puesto el grito en el cielo tras el anuncio del ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre regulación de la publicidad de alimentos y bebidas “no saludables” dirigida al público infantil y adolescentes. Una reacción impostada, desmesurada y que incluso podría tildarse de ridícula. El responsable de redes del PP, Ismael Sirio López, ha tuiteado una fotografía rodeado de chocolates y productos azucarados varios que ha sido duramente criticada y ha hecho las delicias del respetable sediento de memes. A esta iniciativa se ha sumado 7NN, la nueva televisión conocida por su cercanía a Vox.

“Censura esto, Alberto Garzón”, ha posteado la cadena con una imagen de varios de sus trabajadores blandiendo palmeras de chocolate, donuts y demás ultraprocesados azucarados. Como era de esperar, las redes sociales les han atizado.

Lo mismo le ha ocurrido a Sirio. “Que dice Alberto Garzón que va a prohibir nosequé”, escribió -erratas incluidas-. Su mensaje se situó entre lo más comentado de las redes sociales, y no precisamente por su valor. Varios usuarios lamentaron que hizo el ridículo porque, evidentemente, el ministro no pretende prohibir dichos productos, sino fomentar un consumo responsable de los mismos entre los niños para evitar problemas de salud tales como el sobrepeso o adicciones.

Unas de las reacciones a este último tuit ha sido precisamente de Podemos, sustituyendo las marcas de la bollería y chocolatinas por el nombre de casos de corrupción y una puesta en escena algo distinta, incluyendo incluso a Mariano Rajoy en bañador.

Un asunto necesario

Garzón ha dicho que el procedimiento será rápido y se prevé para 2022: "El trabajo está hecho. Tenemos los informes pertinentes para adaptar estos perfiles nutricionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) al sistema de regulación y ya se ha hablado con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia".

"En España el exceso de sobrepeso es del 23,3% y la obesidad del 17.3%. La suma supera el 40% para los niños de entre 6 y 9 años. Son cifras alarmantes y preocupantes", ha alertado el ministro, y ha añadido que estas cifras son el doble entre las familias más humildes que entre las más adineradas, según el informe Aladino.