Pedro Sánchez abría las puertas de La Moncloa este miércoles a las 11:00 horas para confirmar su continuidad al frente del Gobierno español. Su discurso invadía los distintos espacios informativos y eclipsaba las redes sociales. Jorge Javier Vázquez, quien nunca ha tenido pelos en la lengua para hablar de política ni expresar su ideología, ha sido crítico con el discurso del presidente.
Una hora y media después de que el líder socialista anunciara su esperada decisión, el presentador de Supervivientes escribía un tuit al respecto. En él, Vázquez deslizaba que el mensaje de Sánchez se había quedado flojo: "Si Pedro Sánchez hubiera sido hoy mi cita en First Dates, al acabar le habría dicho: 'Sí, pero como amigos'. Necesito más gasolina, dame más gasolina", escribía a través de su perfil de X -anterior Twitter-.
Si Pedro Sánchez hubiera sido hoy mi cita en First Dates, al acabar le habría dicho: "Sí, pero como amigos". Necesito más gasolina, dame más gasolina.
— Jorge Javier Vázquez (@jjaviervazquez) April 29, 2024
Unos días antes, el comunicador catalán llevaba a cabo una reflexión en la que involucraba a Sánchez, Isabel Pantoja y la “fachosfera” para mostrar la estrategia de la derecha política y mediática. “Así como Aquí hay tomate no habría subsistido sin Isabel Pantoja, la fachosfera necesita a Pedro Sánchez para seguir trincando subvenciones. La importancia de la némesis”, sentenciaba Vázquez.
Así como Aquí hay tomate no habría subsistido sin Isabel Pantoja, la fachosfera necesita a Pedro Sánchez para seguir trincando subvenciones. La importancia de la némesis.
— Jorge Javier Vázquez (@jjaviervazquez) April 26, 2024
La carta de Pedro Almodóvar a Pedro Sánchez
Otro de los rostros mediáticos que se pronunció tras la carta de Pedro Sánchez fue el cineasta Pedro Almodóvar y, curiosamente, lo hizo con otra misiva. “Pedro Sánchez no puede más, nosotros tampoco”, se titulaba su columna en elDiario.es en la que explica que se enteró de la noticia al llegar a casa “después de una interminable sesión de fotos para la promoción” y que se “echó a llorar”: “Me topé de bruces con la carta”.
Almodóvar achacaba su reacción al cansancio provocado por el rodaje de su nueva película, que le provoca "esta hipersensibilidad y me debilita frente a cualquier emoción". Sin embargo, el reconocido director mostraba empatía con la situación de Pedro Sánchez, a quien dedicó unas afectuosas palabras en su columna: "En estos momentos, mi corazón está con el presidente y su familia".
La "escalada" sufrida por Sánchez con el caso de su mujer hace que, para Almodóvar, el anuncio no fuese "una sorpresa". Es más, el cineasta defendía que "no existe ser humano que resista lo que el más resistente de nuestros presidentes ha estado sufriendo los últimos años". En una clara defensa de la humanización de la política, el director reconocía su visceral reacción al anuncio: "No me extrañó que se rompiera y me provocó tal indefensión que me puse a llorar como un niño".
El cineasta se mostraba comprensivo con la posibilidad de que Sánchez presentara su dimisión. De hecho, el manchego no entiende "que nuestro presidente no se hubiera plantado ya y nos hubiera mandado al infierno, por utilizar un eufemismo". El director de éxitos como Todo sobre mi madre o Mujeres al borde de un ataque de nervios, hacía un simil entre la persecución al presidente del Gobierno y la que sufrió Manuela Carmena al frente del Ayuntamiento de Madrid, y defendía que Sánchez "tiene derecho a irse y abandonarnos a nuestra suerte. No nos lo merecemos".
Almodóvar no lograba entender "la falta de empatía de los representantes de los medios ante un gesto que nos muestra a un hombre brutalmente herido y roto". Es más, apela al lado humano de la política: "Parece que a Pedro Sánchez no se le reconoce su humanidad, está obligado por su cargo a ser sobrehumano". Las palabras del manchego mostraban su empatía con la situación personal del presidente, de quien destaca la "tristisima elegancia" mostrada ante la acusación de Manos Limpias a su esposa.
Las palabras del creador son duras contra la "nueva técnica para derribar al adversario político, acosarle mediática y judicialmente hasta quebrarle emocional y judicialmente". Almodóvar criticaba que la campaña contra Sánchez se basa "en la crueldad y la tortura psicológica personalizada de la víctima, que se complementa con la tergiversación y manipulación, y que cuenta con la connivencia de uno de los poderes del Estado tan importante como el poder judicial".
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