Los matinales no daban crédito después de presenciar en directo la desaparición de Carles Puigdemont. Este jueves, 8 de agosto, el expresident de la Generalitat regresaba a España, después de permanecer huido durante siete años, para asistir, teóricamente, a la sesión de investidura de Salvador Illa. Sin embargo, poco más tarde de las 09:00 horas, y después de haber dado un breve mitin sobre un escenario situado en el Arco del Triunfo de Barcelona, el político volvía a desaparecer, dando inicio a una búsqueda con tintes cuanto menos cinematográficos. Desde el plató de Espejo Público, a Gonzalo Miró le bastaban tres palabras para describir el show de Puigdemont. 

Los matinales tenían previsto organizar una cobertura exhaustiva a lo largo de la mañana, pero nadie esperaba un desenlace como el que tuvo lugar. Todas las miradas estaban puestas en el líder de Junts, que, teóricamente, iba a acudir a la sesión de investidura de Illa en el Parlament a partir de las 10:00 horas. Sin embargo, tras apenas seis minutos de discurso, volvía a desaparecer, con las cámaras de testigo de su última imagen. El catalán escapaba supuestamente en un coche blanco, por lo que los medios informaban de su nueva huída y del comienzo de la Operación Jaula, puesta en marcha por los Mossos d'Esquadra. La ciudad de Barcelona quedaba sitiada y comenzaban a instarlarse controles, especialmente en la frontera con Francia, con el fin de localizarlo.

En Espejo Público, con Lorena García al frente durante la temporada estival, analizaban las intenciones del expresident con su regreso y posterior e inmediata desaparición. Entre los más tajantes, Gonzalo Miró, quien volvió a demostrar que no tiene pelos en la lengua. El colaborador no entendía la lógica tras el movimiento del político: "Si realmente la intención de Puigdemont ahora es volverse a escapar, ¿qué sentido ha tenido lo de hoy?", se preguntaba. El periodista Amador Ayora apuntaba a que la intención de su huída no es otra que "demostrar que ha burlado y puede burlar a la policía y la justicia una vez más".

El colaborador explicaba que, según sus informaciones, los Mossos d'Esquadra creían que había huido a Francia. Sin embargo, Miró seguía cuestionando la estrategia seguida por el político: "¿Cuál es el sentido, el gesto político? Venir aquí para cantar estas tres frases y volverse a marchar, ¿qué sentido político puede tener?", se preguntaba. Ayora ampliaba su información y aseguraba que Puigdemont "ha cambiado de idea porque, durante las últimas semanas, a todas sus amistades les ha dicho que iba a volver, que se iba a entregar, que su principal objetivo era reventar la investidura y estimular el independentismo: "Él ha cambiado repentinamente de estrategia en las últimas horas". 

Mientras, Gonzalo Miró insistía que "si salimos un momento del fragor de la batalla, este hombre ahora se vuelve a Francia otra vez, pero dentro de diez días lo ves con perspectiva y lo que ha hecho es ridículo". "¿No te ha parecido que se ha reído de nosotros?", le preguntaba, García. "A mí desde luego que no", respondía el hijo de Pilar Miró, que zanjaba su opinión sobre el tema con una rotunda descripción de lo ocurrido: "Si ha venido aquí para soltar esas tres frases y volver a marcharse, políticamente no deja de ser una payasada. Es absurdo, no tiene ningún sentido y es ridículo. Si hubiera conseguido algo, todavía, pero es que es ridículo. ¿Qué sentido tiene?", atizaba. 

boton whatsapp 600