Pocas voces se oponen al consenso que predomina en torno al Mundial de Qatar. La concesión del torneo al país emiratí desató una oleada de críticas, refrendadas con el paso de los años y las sucesivas informaciones que aparecían, como la muerte de más de 6.500 obreros en la construcción de los estadios o los atentados contra los derechos fundamentales, especialmente de las mujeres o del colectivo LGTBI. Sin embargo, esta concatenación de sucesos pasan desapercibidos a ojos de Xavi Hernández. El técnico del FC Barcelona, firme defensor del estado árabe, ha sacado lustre a su disfraz de escudero de Qatar, saliendo al paso de las críticas “injustas” y los prejuicios que envuelven, según él, a la nación.

El idilio catarí de Xavi Hernández daría para un auténtico serial. El exfutbolista y actual entrenador del FC Barcelona escogió el país emiratí para ofrecer los últimos retazos de un talento lastrado por el paso del tiempo. De hecho, pese al exotismo del destino, el retiro dorado del de Terrassa le valió para iniciar una carrera en los banquillos, que le ha devuelto precisamente a su club de origen. Su estatus de privilegio en Qatar le catapultó hacia la primera línea de defensa para contener los ataques de Occidente que describían al estado como una dictadura.

“Qatar no será una democracia, pero funciona mejor que España”, llegó a deslizar el por entonces entrenador del Al Sadd. Unas declaraciones que, pese al paso del tiempo, riman en consonante con las vertidas tras el partido de la Selección contra Alemania. Hernández desempolvó el disfraz de general catarí y salió en defensa de su país de acogida: “Dejará un legado muy fuete para la nación y para la región”.

Una píldora que posteriormente aderezaba con las bondades sujetas a la celebración de la Copa del Mundo. Xavi cree que es “muy bueno” que la cultura árabe se dé a conocer gracias al Mundial, pues entiende que existe un “prejuicio muy grande” hacia ellos. De hecho, considera “injustas” las infinitas críticas que ha recibido el país emiratí, aunque concluye que, pese a ellas, los aficionados se llevarán un “muy buen recuerdo” de Qatar.

“Conceptos erróneos”

El servilismo de FIFA con Qatar, que ha obligado a la organización con sede en Zúrich a poner coto a las reivindicaciones de los futbolistas, son los lodos que trajeron aquellos polvos, como se dice popularmente. Un blanque persistente al que, por supuesto, Xavi Hernández ha contribuido constantemente tras su jubilación. Es más, el de Terrassa defendió, en una entrevista concedida a 20minutos, que se construyeron “conceptos erróneos” que laminan la imagen del país.

El catalán, que mantenía por aquel entonces que Qatar funcionaba mejor que España pese a ser una dictadura, aseguró que el país experimentó un avance sin precedentes hacia una “legislación histórica” que mejoraría las condiciones de sus trabajadores. Por supuesto, de entre la maraña de declaraciones de Xavi no se apreció atisbo alguno de las muertes de los obreros inmigrantes durante la construcción de los estadios.

De hecho, sobre este respecto, Hernández rechazó cualquier crítica en dirección a la explotación laboral en el país y argumentó que existen “conceptos erróneos”. “He visto mejoras por mí mismo. He vivido aquí alrededor de seis años, así que he visto el progreso y sé que están cumpliendo esta promesa”, atestiguó el actual técnico del FC Barcelona, que incluso llegó a afirmar que mantuvo intercambios de pareceres con “muchos trabajadores” que evidenciaban una “mejoría de las condiciones”.