Las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid han sido las que más han sufrido los efectos del coronavirus. Una veintena de familiares de residentes en centros de mayores van a presentar una querella criminal colectiva en los juzgados de Plaza de Castilla (Madrid) contra la gestión de Isabel Díaz Ayuso, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero y directores de 10 residencias.

Los centros de mayores han sido el foco de riesgo y de contagio más acusado desde el inicio de la pandemia. Ya son 5.846 el número de muertes en estos centros de Madrid, es por esto que esta querella se prevé extender a otros municipios de la Comunidad de Madrid por un delito de homicidio imprudente, trato vejatorio, prevaricación y denegación de auxilio. En concreto, se llevará ante la Justicia lo ocurrido en una decena de residencias encabezadas principalmente por los grupos de Domus-Vi y Ballesol.

El colectivo Marea Residencias ha anunciado que se presentarán otras dos querellas colectivas de familiares y también de trabajadoras de las residencias. De este modo, son Domus-Vi y Ballesol los grupos que encabezan estas querellas contra las residencias que afectan a DomusVi-Mirasierra, Aralia Ensanche de Vallecas, Domus-Vi Usera, Aralia Isabel la Católica, Ballesol Pasillo Verde, Ballesol Mirasierra, Gran Residencia, Centro Integrado Municipal, Margarita Retuerto, Manoteras, y Amavir Ciudad Lineal.

La presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso ya reconoció que hubo contagiados en residencias que no fueron trasladados a ningún hospital por la gravedad de su situación: "Si ha habido criterios técnicos y sanitarios que te dicen igualmente esta persona va a fallecer, que mejor se quede ahí, yo no lo puedo cuestionar ahora en frío y a toro pasado", afirmó la popular en una entrevista concedida a El Mundo.

Fue tras conocer la primera cifra de muertes en las residencias madrileñas a finales del mes de marzo, 1.065 fallecidos, lo que llevó a la destitución de Alberto Reyero, consejero de Políticas Sociales, como responsable de las residencias y fuese la Consejería de Sanidad quien tomó el mando único. Tras esto el número de fallecidos siguió creciendo y Reyero criticó que no se hubiese medicalizado las residencias, a pesar de que se estaba realizando el repliegue en hospitales, además de criticar que se enviasen profesionales a Castilla y León mientras no se reforzaba el personal sanitario en las residencias.