El que fuera juez de Familia de Murcia Fernando Ferrín Calamita ha sido condenado a 16 meses de cárcel y 900 euros de multa por un delito de odio hacia dos mujeres lesbianas, una de las cuales había adoptado a la hija de la otra. Ha sumado así un nuevo delito homófobo, pues en 2009 fue inhabilitado por haber perjudicado intencionadamente a un matrimonio de mujeres homosexuales.

En esta ocasión, escribió en sus redes sociales un texto acusando a la pareja de dejar en situación de desamparo a su hija tras separarse. El exmagistrado acostumbra a pronunciarse en Facebook sobre temas controvertidos, mostrando su polémicas opiniones -desde una posición antiabortista, ultracatólica y homófoba- sin pelos en la lengua.

El 18 de julio de 2020 publicó en Facebook una Carta abierta dirigida a C., la hija menor de las dos víctimas, en la que, según el relato de hechos probados la Sala, decía, sin ser cierto, que tenía conocimiento de que había sido abandonada por sus madres y le blindaba su ayuda y asesoramiento si lo requería.

Condena por delito de odio

La Audiencia de Murcia ha considerado que el contenido de esa carta constituye un delito de odio y le ha impuesto una pena de 16 meses de prisión, una multa de 900 euros, 5 años de inhabilitación especial para cualquier profesión educativa y una indemnización de 3.000 euros a cada una de las madres de la niña por los daños morales sufridos por ambas, que afirmaron en su declaración como testigos en el juicio que la carta, de la que se hicieron eco a varios medios informativos, les provocó una situación de acoso tal que tuvieron que acudir a la Fiscalía en busca de protección.

Para la Audiencia, la carta “contiene expresiones que van dirigidas a ofender a todas las personas pertenecientes al colectivo homosexual, en cuanto pone en duda el correcto desarrollo de la menor por el único hecho de haber convivido y haber sido educada por dos progenitoras del mismo sexo”. Además la sentencia señala que, aunque la libertad de expresión protege las ideas que "contrarían, chocan o inquietan al Estado o a una parte cualquiera de la población", "existe un discurso del odio no protegido, que desborda la tutela que dispensa el legítimo ejercicio" del derecho fundamental.

La carta de Ferrín Calamita a C.

"Si no recuerdo mal, naciste en febrero de 2006, por lo que ahora tendrás 14 años", comenzaba Calamita. "No nos conocemos personalmente. Yo fui el juez de familia de Murcia que tramitó la solicitud de adopción presentada en mayo de 2006 por Vanesa, basada en el hecho de ser cónyuge de tu madre, Susana, como si ese solo dato le otorgase un derecho absoluto a la adopción, que no existe y sí el tuyo al desarrollo armónico de tu personalidad".

"Ha llegado a mi conocimiento recientemente que se han divorciado y te han abandonado y entregado a los servicios sociales. Lo siento mucho. El tiempo me ha venido a dar la razón, por desgracia. He hecho gestiones para averiguar tu paradero, pero lógicamente no me han facilitado ningún dato en ese organismo de la Consejería de la CARM -Comunidad Autónoma de la Región de Murcia- que ahora se llama de Familias y LGTBI", continuaba.

"El caso es que tienes ya más de 12 años. Que sepas que tienes derecho a ser oída por un juez y que, cuando cumplas los 16, puedes instar la emancipación o habilitación de edad y ejercitar acciones legales acto seguido contra el Estado y/o la CARM y contra tus dos 'mamás'. A tu disposición para lo que te pueda ayudar, tanto en lo personal como en lo profesional jurídico. Se ha menoscabado tu dignidad y tus derechos básicos como persona, sujeto de derechos. Una grave injusticia", finalizaba la carta.

Petición de disculpas

El 8 de junio de 2021, tras la denuncia que interpuso contra él la Fiscalía, Ferrín Calamita volvió a publicar en Facebook para retirar sus palabras y pedir disculpas a las perjudicadas. El exjuez les dio sus "sinceras disculpas" y reclamaba "humildemente su perdón". "Únicamente decir que en absoluto el móvil ha sido el odio, rencor, animadversión o intención de dañar o difamar", aseguraba.

Aseguró que, "atendiendo a fuentes sin fiabilidad contrastada", "cometí el error de hacer determinados comentarios, afirmando hechos personales de Vanesa y Susana - madres de C.- que pueden no ajustarse a la realidad y que de ser así han podido causar un daño injusto a las dos personas aludidas, que como todas merecen el respeto intrínseco a su dignidad humana".

Inhabilitado por prevaricación

El exmagistrado fue inhabilitado en 2009 por haber perjudicado intencionadamente por su homofobia a un matrimonio de lesbianas en la adopción por parte de una de ellas de la hija biológica de la otra. El Tribunal Supremo fue quien impuso la condena de inhabilitación por el retardo malicioso en la adopción de la niña cuando estaba al frente del juzgado de Familia de Murcia.

El Supremo consideró que las actuaciones adoptadas por el juez no fueron unas "injustas resoluciones retardatorias" sino también un "despliegue de activa obstrucción beligerante" para impedir la aplicación de la ley, pretendiendo cuestionar la idoneidad para la adopción por la orientación sexual de la mujer solicitante.

En abril de 2018, una vez cumplida la pena de inhabilitación, Ferrín Calamita solicitó reincorporarse a la Judicatura y el Consejo General del Poder Judicial se lo desestimó. El Tribunal Supremo confirmó la decisión del CGPJ basándose en la "gravedad del delito" de prevaricación, quedando así fuera de la carrera judicial.