Al igual que la música, la fe parece amansar a las 'fieras'. De forma ordenada y civilizada, la Basílica de Santa Cruz del Valle de los Caídos ha acogido la mañana de este sábado 5 de octubre a unos 400 feligreses que habían sido llamados por la Fundación Nacional Francisco Franco para "rezar por el alma" del dictador. Una misa cantada, gratuita y programada a las 11:00 horas que ha empezado puntualmente, dejando fuera del rito litúrgico a los más rezagados.

A la entrada de la Basílica, la fila de personas que deseaban acceder aumentaba cada minuto. Sin embargo, ha sorprendido la escasa asistencia, teniendo en cuenta el inmenso espacio disponible que hay dentro y fuera del templo y la gran repercusión que la exhumación del dictador ha tenido en las redes sociales, donde cientos de indignados se oponen a que ocurra.

La cita ha congregado a pocos medios de comunicación. Apenas se han visto cuatro fotógrafos, un cámara y un reportero de Europa Press, y un corresponsal francés que ha venido exclusivamente a cubrir el acto. Este mismo periodista ha explicado a la Cadena SER que reservó una habitación en la Hospedería Santa Cruz, ubicada en el propio Valle de los Caídos, un albergue que recauda anualmente, tal y como ha informado el corresponsal, un total de 900.000 euros, lo que se traduce en cientos de turistas que visitan el monumento al dictador cada año.

En la explanada, media hora antes de dar comienzo la misa, un hombre de unos 50 años, A. A., ha declarado que la sentencia del Tribunal Supremo "está fuera de lugar" y que "no hay que hacer herida, sino perdonar y seguir la vida", insistiendo así en la idea repetida por partidos y asociaciones de extrema derecha de que "murieron de los dos bandos". 

Preguntado por si considera la exhumación una profanación, A. A. se ha desmarcado de las declaraciones de Vox y ha apuntado que se trata de una exhumación, "una exhumación que no tiene sentido", ya que para él, "esto abre heridas que estaban casi cerradas, por lo que enfrenta a la gente".

Además, ha subrayado que lo ocurrido durante la Guerra Civil y la dictadura de Francisco Franco "forma parte de la historia de España, blanca o negra". Además, ha lamentado que "no se le permita a la familia enterrar los restos de su abuelo en el panteón que tienen en propiedad en la Catedral de la Almudena" una prohibición que estima "anticonsticional".

Por último, ha acusado al Gobierno de "estar fomentando una pelea que ya no existía", quizás sin tener en cuenta que para muchas familias del bando republicano ni las heridas se llegaron a cerrar nunca, ni la pelea terminó cuando murió el dictador.

Banderas preconstitucionales y gritos de "¡Viva Franco!"

Sin embargo, no todos los asistentes han acudido al lugar para rezar en la misa. Gupos turísticos de extranjeros se encontraban allí disfrutado de su visita programada, haciendo fotos, grabando lo que acontecía y asombrándose de aquellos, una minoría, que portaban banderas preconstitucionales propias de la etapa de la dictadura franquista. 

Interrumpiendo la calma, el silencio y el respeto religioso que profesaban los interesados en entrar a la Basílica, un grupo de tres hombres -de ideología fascista- se han paseado ondeando una gran bandera de España, en este caso, la oficial, entre gritos de "¡Viva Franco!", "Que os de miedo", "¡Viva España!".

No todos los medios son bienvenidos

Minutos antes de entrar, un reportero que estaba entrevistando a la poca variedad de perfiles que conformaban los asistentes, la mayoría familias con niños, ancianos y hombres jóvenes de entre 20 y 30 años, ha sido "invitado a alejarse" de la fila principal por un "alto cargo" de Patrimonio del Valle de los Caídos, según explica una agente de seguridad a ElPlural.com

Mostrando su discrepancia a la "invitación" de marcharse, el periodista y el cámara han sido acompañados a las escaleras de subida a la explanada donde se les ha indicado que trabajasen desde allí, con el fin de "no molestar" a los feligreses.

Una misa repleta de alusiones

La misa, cantada, ha dado comienzo a las 11:00 horas. Una trabajadora ha anunciado que todos los asientos habían sido ocupados, por lo que habría que estar de pie durante el rito litúrgico, el cual ha durado una hora. Hasta donde alcanzaba la vista, se observaban alrededor de unas 250 personas

Con diferentes citas de la Biblia, los eclesiásticos han hecho alusión a la situación política haciendo un llamamiento a "la reconciliación" y al "descanso de los muertos": "Dios nos encargó el ministerio de la reconciliación, ha puesto en nosotros el mensaje de la reconciliación", "Señor, haz que termine la división en tu iglesia", "que los caídos descansen eternamente y así concedan la paz a todos los españoles", han sido algunos de los mensajes lanzados.

Después de que los monaguillos hubieran pasado con la cesta entre los feligreses, se han dado por concluidas las distintas intervenciones del conjunto del clero, y se ha procedio al reparto de la hostia consagrada. 

También aquellos que no habían tenido posibilidad de ver la misa desde los bancos por haber llegado rezagados, unas 100 personas más, han podido tomar el cuerpo de Cristo, pues uno de los religiosos se ha acercado a ellos para repartirlo entre los más devotos.  

Un cura reparte la hostia consagrada a los rezagados en la misa por Franco en el Valle de los Caídos. Irene Garrido

La franquista Pilar Gutiérrez llega con retraso

La conocida como la mujer más franquista del país, líder de Movimiento por España y promotora de este acto religioso por el alma de Franco, Pilar Gutiérrez, ha entrado en la Basílica una vez terminada la misa.

En declaraciones a ElPlural.com, ha lamentado su retraso y ha explicado que ha estado "en la cola repartiendo folletos con nuestra información, la de nuestra página web". "Muchos de los que están aquí irán mañana a Vistalegre", ha advertido, haciendo referencia al mitin de precampaña organizado por Vox. Preguntada por si ella acudirá, ha respondido que "no tiene entrada" porque "están agotadas", pero que "irá a lo que llegue".

Un centenar de personas fuera 

A pesar de que la Basílica tenía suficiente aforo para acoger a más feligreses, muchos de ellos, alrededor de un centenar, han seguido haciendo cola terminado el rezo. Por lo que la participación total de la peregrinación ha sido de un total de 400 personas. 

Es posible que rezar por el "alma" de un dictador no sea el mejor plan para un sábado, ni siquiera para sus más fieles seguidores.