El verano se empieza a instalar en España y, como cada año, nos dejará sofocados durante unos cuantos meses. Este tiempo veraniego abre la veda de chiringuitos y terrazas para intentar llevar las altas temperaturas de la mejor manera posible. Para no perder la línea en ese intento de huir del calor, a continuación hacemos un repaso de las bebidas más populares, fijándonos en su contenido calórico para recomendarte la mejor forma de saciarte y refrescarte sin tener que engordar. 

Es necesario apuntar que las siguientes cifras de calorías son para cantidades de entorno a 330 mililitros, una lata. Además, la bebida básica de cualquier dieta equilibrada siempre debe ser el agua, que con sus 0 kilocalorías nos ayudará no pasarnos de las 1851 kilocalorías que un español medio debería consumir al día.

Horchata, 239 kilocalorías

Horchata

La típica bebida valenciana se elabora con chufas trituradas, maceradas y mezcladas con agua y un 12% de azúcar. La horchata ofrece un alto aporte nutricional, tiene un 2,4% de grasas y es rica en almidón y ácido linoléico. En consecuencia, es la bebida más típicamente veraniega que menos nos ayuda a mantener la línea. 

Bebidas de café, 169 kilocalorías

Refresco de café

Los supermercados ofrecen numerosas bebidas frías que sustituyen al clásico café con hielo. Sin embargo, su contenido calórico varía en función de la leche con la que se elabore o de la cantidad de azúcares añadidos. De todas formas, en absoluto estas bebidas supondrán una ayuda para 'lucir palmito' en la playa.

Granizados, 150 kilocalorías

Granizado

Aunque están compuestos mayoritariamente de agua helada y un contenido de fruta prácticamente anecdótico, los clásicos granizados tampoco serán un aliado en nuestra pérdida de peso debido al alrededor del 12% de azúcar con el que se elabora. 

Refrescos, 132 kilocalorías 

Refresco de cola

Con o sin gas, nunca deben sustituir al agua ya que su contenido en azúcares es demasiado elevado para consumirlos con cierta frecuencia.

Tinto de verano, 125 kilocalorías

Tinto de verano

Vino tinto rebajado con gaseosa. Uno de los reyes de las terrazas veraniegas, con tanto alcohol como una cerveza y suficientes calorías como para no abusar de él durante la temporada de piscinas.