Cristiano Ronaldo ha comparecido durante una hora y media en el Juzgado de Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) como investigado por una denuncia de la Fiscalía por un supuesto fraude fiscal de 14,7 millones de euros. Fuera le esperaban numerosos periodistas convencidos de que el delantero del Real Madrid hablaría a la salida. Así lo había insinuado la agencia de comunicación de CR7. Sin embargo, las declaraciones -y muy breves- las ha hecho el director de la agencia, para decir que todo había ido bien y remitir a un inminente comunicado. La indignación ha sido mayúscula y ha acabado abucheado por los numerosos periodistas allí congregados.

El delantero portugués entró al juzgado en coche poco antes de las 11.00 horas a través del garaje del edificio de oficinas donde está situado, por lo que evitó a los dos centenares de periodistas de 15 países y las 40 cámaras de televisión dispuestas en dos hileras tras las vallas de seguridad que le esperaban en la puerta principal. El jugador también salió por el garaje, pese a que se había dispuesto por parte de la agencia de comunicación del jugador un estrado para que pudiera hacer una declaración ante los periodistas.

Cristiano Ronaldo llega al juzgado para declarar por el presunto fraude fiscal. EFE