Los restos de José María Ruiz Mateos han sido exhumados, por orden judicial, para realizarles la prueba de paternidad de Adela Montes de Oca, quien asegura ser hija suya.
Los restos han sido trasladados este viernes desde el columbario de la iglesia Nuestra Señora de la O de Rota (Cádiz) al cementerio municipal, para que los forenses extraigan las muestras necesarias para practicar las pruebas de ADN.
La familia, en contra
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Pozuelo de Alarcón ordenó la exhumación, después de que Adela Montes de Oca realizada su petición, en contra del criterio de los hijos del polémico empresario. En el auto, el juez dice que la prueba se hace garantizando la "integridad, respeto y memoria" del fallecido, y emplaza a la viuda y a los hijos a que manifiesten si desean asistir a la exhumación.
La familia de Ruiz Mateos ve la exhumación y la prueba de paternidad como medidas desproporcionadas e ilegítimas, y argumenta que "si el fallecido no llegó a ejercitar en vida su derecho a negarse a dicha prueba por no ser requerido al efecto, no puede procederse ahora sin el consentimiento de la viuda y los hijos". Sin embargo, el mismo juez dio orden en 2014, cuando aún vivía el empresario, para que se realizara la prueba de ADN, y su auto que no fue recurrido por ninguna de las partes.
El empresario fue citado en tres ocasiones
Ruiz Mateos fue citado en tres ocasiones para la extracción de muestras de ADN, pero en ninguna de ellas se presentó. Posteriormente, pidió el sobreseimiento de la causa como consecuencia de "una enfermedad muy grave con padecimientos incurables" que le impediría ir a juicio. El empresario murió poco después, antes de la celebración de dicha vista, y el juez ordenó impedir la incineración de sus restos hasta que no terminara el actual procedimiento.
