Un grupo de manifestantes de extrema derecha, agitados por una convocatoria a través de las redes sociales, se han concentrado en la tarde de este viernes en la calle Ferraz de Madrid, donde se sitúa la sede nacional del PSOE, para protestar por el acuerdo del Partido Socialista con ERC y sus negociaciones con Junts de cara a la firma de una futura ley de amnistía para sacar adelante la investidura del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.

La concentración ha dejado imágenes muy tensas, con cánticos que abogaban por el ingreso en prisión del jefe del Ejecutivo, revivían a Franco e incurrían en tintes racistas. La Policía ha tenido que bloquear los accesos a la sede socialista para evitar males mayores y que la escalada de la tensión alcanzase planos más grandes.

Un asistente a esta convocatoria, de hecho, ha sido detenido por intentar saltarse el cordón policial. Fuentes de la Delegación del Gobierno han precisado que la Policía pidió tres veces la documentación a este asistente a la concentración tras saltarse el cordón policial y, ante su negativa, se le ha detenido.

Alrededor de un millar de personas han protestado en una convocatoria que surgió en las redes sociales y que terminó poco después de las 21:00 horas. Apoyada por organizaciones contra el nacionalismo catalán como 'Dolça Cataluña', la convocatoria reunió a un grupo de manifestantes portando banderas de España, algunas de Cataluña y con gritos como 'Pedro Sánchez a prisión' o 'España es una y no 51". También se han escuchado cacerolas y silbidos contra el jefe del Ejecutivo en funciones y el expresidente catalán Carles Puigdemont.

La Policía Nacional ha acordonado la zona y ha cortado la calle Ferraz a la altura de Buen Suceso, a unos pocos metros de la sede del PSOE. Fuentes de la Delegación del Gobierno en Madrid han explicado que se han desplegado agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), conocidos como antidisturbios, para garantizar la seguridad en la céntrica calle ante una concentración que no estaba comunicada.