“Estimado Presiente”. Con este solemne encabezado, el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha arrancado la carta que ha remitido hoy a Pedro Sánchez y que acompaña al plan energético propuesto por el Partido Popular. Un dossier que se ha hecho esperar casi una semana. El pasado martes, durante el debate en el Senado, el gallego blandió un documento mientras afeaba al presidente del Gobierno que aún no tuviera listo su plan de contingencia. Decía que era urgente tomar decisiones valientes, y sin embargo, el envío se ha dilatado seis días. Moncloa incluso se preguntaba cuándo llegaría e ironizan con que, si estaba listo ya la semana pasada, por qué no ha sido hasta hoy cuando lo ha trasladado.
A primera hora de este lunes, Feijóo ha profundizado en algunas de las medidas en una entrevista en la Cadena COPE. La más llamativa, avanzada el fin de semana durante una comparecencia en Tarragona, ha sido la de limitar el precio de las energías renovables y la nuclear. El cinismo del gallego ha sido tal que ha pasado de tildar el tope al gas -exepción ibérica- de “timo” propio de un Gobierno “populista” a proponer topar las energías. Una iniciativa absurda, dicho sea de paso, puesto que el precio de la energía se fija en función de la más cara, es decir, el gas, así que topar el resto no tendría ningún efecto si no se reforma el sistema empleado para calcular la factura eléctrica.
Además de topar las renovables, Feijóo ha abundado en la necesidad de incentivar el ahorro energético de las familias y las empresas premiando con “descuentos directos”. En concreto, propone descontar entre un 7% y un 40% la factura a los clientes que rebajen su consumo entre un 5% y un 20%. También ha insistido en el impulso de las nuclear, esgrimiendo que España debe aprovechar todas sus capacidades. Sin embargo, cabe recordar que el cierre de las centrales nucleares está previsto para 2027, por lo que a día de hoy, siguen operando. Según datos del Ministerio de Transición Ecológica, hay cinco centrales nucleares en funcionamiento situadas en cinco emplazamientos, dos de las cuales disponen de dos reactores cada una, por lo que en total hay siete reactores. En consecuencia, su principal reclamo hace aguas.
Asimismo, el plan recoge la necesidad de prolongar las rebajas del IVA del gas y la luz a todo el invierno, lo que el Gobierno ya valoró; crear un organismo semejante a la AIReF para encargar un estudio independiente sobre un modelo energético alternativo; y la apuesta por las renovables impulsando su desburocratización, entre otras.
Tarde y mal
Desde que Feijóo blandiera aquel documento en el Senado han tenido que pasar seis días hasta que se lo ha hecho llegar a Moncloa. La pregunta es: ¿Por qué no lo remitió antes si la situación es tan sumamente acuciante?”. Según fuentes, el gallego quería esperar a informar de todo al Comité de dirección, que se ha reunido esta semana. Y es que, algunos dirigentes del PP han lamentado que no conocían las líneas maestras del plan hasta este lunes. “Parte del equipo económico desconocía las iniciativas que integraban el plan. Es cosa de Juan Bravo”, señalaba un diputado este periódico.
“Quedo a su disposición”
Feijóo ha admitido en su escrito la existencia de dificultades fruto del “incierto panorama internacional”, por lo que se ha ofrecido a negociar un plan para abordar “uno de los principales problemas que afronta nuestro país”, a saber, “los desorbitados precios de la energía”.
El documento Propuestas para un pacto energético que proteja a las familias y empresas. Un plan para la recuperación de la economía de España incluye un total de 59 propuestas. Los populares esperan que sienten los mimbres del nuevo plan de contingencia que Moncloa está elaborando y, en consecuencia, el líder de la oposición se ha ofrecido para “debatir sobre estas medidas, aclarar cualquier dura y, si fuese el caso, negociar su implantación”.
“Estoy convencido de que vale la pena que el Gobierno acuerde con la alternativa una política de Estado en aras de alcanzar reformas que otorguen a nuestros ciudadanos una energía más asequible, sostenible y competitiva en el presente y en el futuro”, remacha Feijóo.
