Pedro Sánchez ha propuesto este lunes la posibilidad de eliminar la inviolabilidad de la que gozan los jefes del Estado en España, tal y como ha ocurrido con algunas de las irregularidades fiscales que cometió el rey emérito, Juan Carlos I y que se comenzaron a conocer tras su abdicación.

El presidente del Gobierno ha revelado durante una entrevista en la Cadena SER que las noticias e investigaciones sobre los negocios del padre del rey Felipe VI no pueden vincularse con la institución: "En el plano judicial, insisto, está la Fiscalía y los tribunales dirán. Yo ahí no puedo pronunciarme. En el plano político, el problema es que se tendrían que juzgar personas, pero no las instituciones".

"Algunos grupos parlamentarios quieren abrir un debate sobre la institución. Yo siempre he dicho que el PSOE es un partido comprometido con la Constitución y todas sus instituciones y esos debates no los queremos generar", ha razonado, en defensa del actual monarca español.

Al ser preguntado sobre la posible vuelta de Juan Carlos I a España, el presidente español ha detallado que la Casa Real es "una institución distinta" a la suya, justificando que "su vuelta no corresponde al ámbito del Gobierno de España y sí lo respeto".

Sánchez sí cree necesario que el rey emérito salga a dar "explicaciones" a los españoles "sobre todas las dudas que tiene la ciudadanía": "Debe señalar cuáles son las razones que le han hecho irse de España. Es un debate que me causa tristeza, no por el Juan Carlos, sino porque tenemos un jefe del Estado, comprometido con la transparencia, que defiende una forma de practicar su monarquía de forma contemporánea. Tenemos un gran Rey".

El líder del Ejecutivo ha mostrado su intención de eliminar la inviolabilidad del jefe del Estado porque considera que "es producto de otra época de nuestra democracia", pero destaca que para ello deberá aplicar estas reformas con el principal partido de la oposición, el Partido Popular. Algo que no cree que se pueda producir: "Para este tipo de reformas, dos no bailan si uno no quiere".

El presidente del Gobierno también ha descartado la creación de una Ley de la Corona, matiza que "nunca la hemos planteado así" y pone en valor el papel que está teniendo Felipe VI desde el inicio de su reinado: "Hemos visto cómo se han dado pasos para ofrecer transparencia sobre las cuentas de la Casa Real. En ese camino estamos trabajando".