La alianza de Partido Popular y Vox ha vuelto a poner de manifiesto su sintonía a la hora de tomar decisiones conjuntas. Resoluciones ciertamente controvertidas y cercanas a los preceptos de la extrema derecha. Tras tumbar en Murcia la moratoria urbanística que prohíbe construir en el Mar Menor y vetar la declaración de incompatibilidad de altos cargos en Extremadura, el tándem ha dado vía libre al juego en Castilla y León. La Junta liderada por el popular Alfonso Fernández Mañueco y el vicepresidente ultra Juan García Gallardo ha dado luz verde a la instalación masiva de casas de apuestas en la región con más de una treintena de salas. En concreto, la concesión recoge la posibilidad de construir 36 nuevos locales en los próximos tres años, que se concentrarán especialmente en las provincias de Valladolid y Salamanca. La empresa beneficiaria es la conocida Sportium.

PP y Vox dan vía libre al juego

Este lunes la unión de PP y Vox ha dado sus frutos de nuevo. No solo su pacto ha llevado a votar en contra de ampliar la moratoria urbanística para prohibir la construcción de edificaciones nuevas en el entorno del Mar Menor, unas aguas castigadas por la agricultura intensiva y otras explotaciones, sino que también ha servido para dar un paso más en favor del juego. Y es que la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León ha dado luz verde a la concesión de un total de 36 nuevos locales de apuestas en diferentes provincias de la región a construir en los próximos tres años. En concreto, la Dirección General de Relaciones Institucionales, en manos del PP, ha otorgado las nuevas licencias a la compañía Sportium Apuestas Oeste SA, filial de la empresa Sportium, tal y como se recoge en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL).

De esta forma, Castilla y León no solo no va a frenar la lucha contra la ludopatía -una lacra entre las clases bajas y más desfavorecidas- sino que pone las bases para avanzar en esta enfermedad. Lo mismo ocurre en Andalucía. La región castellana contará con una treintena de nuevos locales de apuestas desde ahora hasta el 2026, concentrados sobre todo en las provincias de Valladolid y Salamanca. Estas concentrarán el mayor número de salas -siete y seis, respectivamente-, que se empezaran a construir a lo largo del primer año. En concreto, se han autorizado 36 espacios diferenciados entre casas o áreas de apuestas dentro de otros establecimientos. Estas están divididas en 20 casas de apuestas y 16 córners dentro de salones de juego, salas de bingo o casinos, a nombre de Sportium Apuestas Oeste, S.A, encargada de su "organización y explotacion".

Más de 30 nuevas salas

En el primero de los casos, la distribución será de una sala en cada provincia para el año inicial -es decir, verano de 2024- hasta un total de nueve mientras en el segundo y tercer año siguiente -hasta 2026- se establecerán las once restantes organizadas en cinco para Valladolid, dos en Salamanca, dos en Burgos, una en Palencia y otra en Zamora. En cuanto al segundo de los casos, las 16 zonas de juego estarán ubicados en Salamanca (3), León (3), Palencia (2), Segovia (2), Soria (2), Zamora (2), Burgos (1) y Valladolid (1). Así, mientras esta última encabeza la lista, la única provincia que no contará con ninguno de estos nuevos establecimientos o áreas será Ávila.

Esta nueva ejecución por parte de la junta -una resolución publicada en la tarde de este lunes en el BOCYL- está orientada a modificar la autorización que el Gobierno de la región otorgó en abril del año 2015 en favor de Sportium, regulando la organización y explotación de apuestas en la Comunidad liderada actualmente por el Partido Popular de Mañueco y los ultras de Gallardo. Por ahora en el anuncio no se detallan las ciudades o pueblos en los que van a implantarse estas salas o puntos de apuestas o si solo se van a enmarcar en las capitales de provincias o en otras localidades de menor tamaño. Lo cierto es que esta medida no pilla por sorpresa a los habitantes de la región ya que fue aprobada el pasado miércoles 19 de julio por la Dirección General de Relaciones Institucionales que depende de la Consejería de Presidencia del Gobierno autonómico, en manos de PP y Vox.

Nueva Ley del Juego

Cabe destacar que este es un giro en el argumentario del propio Ejecutivo, que hace tan solo cinco meses -en febrero de este año- envió a las Cortes una nueva Ley del Juego que implanta la identificación expresa en el acceso a salones de juego para dificultar que entren menores y que aumenta la distancia entre las casas de apuestas y los colegios hasta los 150 metros. El Proyecto de Ley -pendiente de debate y votación para su aprobación- fija en un mínimo de 300 metros la separación que deberán mantener los locales de juego entre sí mismas e incrementa la distancia de estos establecimientos con respecto a los centros educativos. Esta pasa de los 100 metros actuales a los 150.