Los grupos parlamentarios en el Gobierno han registrado la proposición de una ley orgánica para reformar el sistema de elección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que permita desbloquear su renovación, bloqueada por el PP. El líder de este partido, Pablo Casado, ha acusado a Pedro Sánchez de querer "liquidar la separación de poderes" y ha anunciado que acudidirá al Tribunal Constitucional y a los Tribunales Europeos. ¿Pero por qué el interés de los populares en no facilitar la renovación? La respuesta está en sus problemas judiciales, Gürtel y Kitchen. Lo explica  el jurista Javier Pérez Royo en un artículo publicado en Eldiario.es.

El ingreso en prisión de Bárcenas y Kitchen

Los actuales miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) fueron elegidos por el Congreso de los Diputados y el Senado el 29 de noviembre de 2013. Unos meses antes, el 27 de junio, el extesorero del PP, Luis Bárcenas ingresó en la cárcel de Soto del Real por sus cuentas suizas, que conducían a la presunta financiación ilegal del PP.

El ya presidente del Gobierno en aquel momento, Mariano Rajoy, y la cúpula popular se desentendieron de su tesorero presuntamente corrupto. No tardó mucho en ponerse en marcha la operación Kitchen desde el MInisterio del Interior para sustraer a Luis Bárcenas la información comprometedora para el PP y el Gobierno. En este escenario se produjo la renovación del Consejo General del Poder Judicial.

"Para el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón y para la mayoría parlamentaria del PP, la renovación del CGPJ era políticamente una suerte de prolongación de la Operación Kitchen", escribe Pérez Royo.

Desde el MInisterio del Interior se tenía el objetivo de destruir las pruebas que pudiera tener Bárcenas y desde el Ministerio de Justicia, que dirigía entonces Alberto Ruiz Gallardón se debía trabajar para controlar los nombramientos de presidentes y magistrados y evitar que las operaciones Gürtel y Kitchen lastraran al Gobierno de Rajoy.

El actual Poder Judicial no se entiende sin Gürtel y Kitchen

"El CGPJ actual no se entiende sin la Gürtel y sin la Kitchen. Es una excrecencia de lo que había sido la acción del Gobierno y del PP desde hacía casi una década. Por eso, no solamente se produjo la renovación del CGPJ, sino que se modificó la normativa sobre la organización interna del órgano, produciéndose una concentración de poder extraordinaria en el Presidente del órgano, que, no por casualidad, había sido Director General de Justicia con José María Aznar", explica Pérez Royo.

Es por esto que el PP de Pablo Casado se resiste a la renovación del Poder Judicial. "Con cualquier CGPJ renovado, no podría contar con la "comprensión" con que cuenta con el actual CGPJ, que, de momento, ha elevado a la Sala Segunda del Tribunal Supremo al Magistrado de la Audiencia Nacional que votó en contra de que el PP fuera condenado como partido en la sentencia del caso Gürtel", añade el periodista.