El Gobierno de Irán ha anunciado que empleará "todas las herramientas disponibles" para responder a los bombardeos perpetrados por Israel el pasado sábado, que resultaron en la muerte de cuatro militares iraníes. Teherán ha dejado claro que este incidente no quedará sin respuesta. El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Esmaeil Baqaei, ha declarado que la respuesta será proporcional al tipo de ataque recibido, aunque no ha ofrecido más detalles sobre las medidas específicas que tomarán.
En sus declaraciones, Baqaei ha elogiado la actuación de los sistemas de defensa aérea iraníes, describiéndola como un punto de inflexión en la historia del país. Además, ha señalado que las condenas de los países de la región a los ataques israelíes evidencian que consideran al régimen israelí como el principal problema de la región. Esta visión compartida refuerza la postura de Irán frente a las acciones militares de Israel, que han sido calificadas de ilegítimas e ilegales por el comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, Hosein Salami.
Irán mantiene su postura nuclear tras ataques de Israel
Baquaei ha reiterado que Irán no modificará su doctrina nuclear a raíz de los ataques israelíes. Ha enfatizado que la posición de Irán en contra de las armas de destrucción masiva es clara y que no creen en la militarización de su programa nuclear. Las palabras del portavoz iraní llegan después de que el comandante Salami advirtiera a Israel sobre las consecuencias de sus acciones, destacando la gravedad de los bombardeos israelíes en territorio iraní.
El Ejército israelí llevó a cabo una serie de bombardeos contra posiciones militares en Irán, en respuesta a los ataques aéreos iraníes del 1 de octubre. Estos ataques iraníes, que involucraron el lanzamiento de cerca de 180 misiles balísticos, fueron justificados por Teherán como una represalia por el asesinato de Ismail Haniye, líder del brazo político de Hamás, en un ataque en Teherán, y de Hasán Nasralá, secretario general de Hezbolá, en un bombardeo israelí en Beirut.
El Ejército israelí ha confirmado que varias de sus bases aéreas fueron alcanzadas durante el ataque iraní, aunque ha negado que se produjeran daños significativos. Según las autoridades israelíes, no hubo impactos en aviones o almacenes de armas. Sin embargo, han evitado proporcionar detalles sobre el porcentaje de interceptaciones logradas para no ofrecer información que pudiera ser utilizada por Irán y Hezbolá para mejorar sus tácticas.