El portavoz militar hutí, Yahya Sarea, ha confirmado casi medio centenar de ataques internacionales contra sus emplazamientos en Yemen desde la noche del sábado en seis provincias del país, con especial incidencia en Saná, donde está la capital, y Taiz, lugar este último donde la insurgencia lleva años efectuando un bloqueo sobre la capital homónima entre las críticas de organismos humanitarios internacionales.

En este sentido, la insurgencia hutí de Yemen ha avisado que la última serie de ataque lanzados en las últimas horas por Estados Unidos y Reino Unido no tendrá efecto disuasorio alguno para frenar su campaña para impedir el tránsito en el mar Rojo como medida de presión contra Israel para detener la matanza sobre el pueblo palestino.

Concretamente, Sarea ha dado constancia de de 48 ataques, 13 de ellos en Saná, once en Taiz, nueve en Hodeida, donde se encuentra el principal puerto del país, imprescindible para la llegada de ayuda humanitaria; siete en Al Baida, siete en Haya y uno en Sada. EEUU y Reino Unido, por contra, habían hablado de 36 ataques. El portavoz hutí no informa de víctimas en su mensaje.

"Estos ataques no nos disuadirán de nuestra postura moral, religiosa y humanitaria en apoyo del firme pueblo palestino en la Franja de Gaza, y no quedarán sin respuesta y castigo", ha zanjado Sarea.

Estos recientes ataques internacionales van en consonancia con la serie de bombardeos efectuada el viernes por la noche por Estados Unidos contra milicias proiraníes en Irak y Siria, en represalia por los ataques de estos grupos a sus posiciones en la región. En ambos casos, el denominador común ha sido la guerra entre Israel y Hamás, un conflicto donde tanto los grupos proiraníes como los insurgentes de Yemen han concedido su apoyo manifiesto al movimiento islamista palestino.

Israel sigue al ataque

Por otra parte, fuentes médicas palestinas han confirmado que las fuerzas israelíes han realizado 12 ataques en el sur de la Franja de Gaza en las últimas 24 horas, lo que ha dejado un balance de 107 muertos y 165 heridos. En concreto, aviones de combate y artillería israelíes han lanzado en la madrugada del sábado al domingo una serie de intensos ataques, dirigidos a varias zonas de la gobernación de Khan Yunis, según fuentes locales recogidas por la agencia Wafa.

Las fuentes han informado que aviones de combate israelíes atacaron el barrio de Al-Manara, al sureste de Khan Yunis, simultáneamente con continuos bombardeos de artillería en la zona de Miraj en la provincia. Los ataques aéreos también han alcanzado las proximidades del Hospital Europeo de Gaza, lo que ha provocado lesiones a una persona desplazada y daños materiales a los departamentos del hospital. A su vez, una estación de combustible cercana al hospital ha sido alcanzada, lo que ha causado la muerte de un civil y ha herido a otras seis personas como consecuencia de las explosiones.

En Rafá, aviones de combate israelíes han atacado un edificio residencial en el barrio de Qeshta y un niño ha muerto y varias personas han resultado heridas cuando un apartamento residencial en la Torre Hassan Salama en el barrio de Jenena, al este de Rafá, ha sido alcanzado por un bombardeo israelí.

Mientras tanto, informes locales han confirmado que las fuerzas de ocupación atacaron torres residenciales en el barrio de Al-Rimal de la ciudad de Gaza, provocando un incendio en una de las torres residenciales atacadas. Los aviones de combate israelíes también han atacado tierras agrícolas cerca de la zona de Jafraawi, al sur de Deir al-Balah, en el centro de Gaza.

En un balance preliminar, los ataques israelíes a la Franja de Gaza desde el 7 de octubre han resultado en el asesinato de más de 27.238 personas, más de 66.451 heridos y más de 2 millones de desplazamientos forzosos. La gran mayoría de los desplazados se han visto obligados a trasladarse a la densamente poblada ciudad sureña de Rafá, cerca de la frontera con Egipto, lo que supone el mayor éxodo masivo desde la Nakba de 1948.