La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha requerido a las autoridades israelíes que tomen "todas las medidas posibles" para salvaguardar a la población palestina en la Franja de Gaza y garantizar con carácter de "urgencia" la asistencia necesaria, según medidas cautelares adoptadas tras la denuncia presentada por Sudáfrica ante el tribunal. En una lectura pública, la jueza Joan E. Donoghue ha afirmado que la CIJ tiene competencia sobre este caso, respaldando la capacidad de Sudáfrica para demandar a Israel por supuesta violación de la Convención sobre el Genocidio y permitiendo así la continuación del litigio.

Donoghue ha destacado la "tragedia humana" en Gaza, confirmando la profunda preocupación de la CIJ por el elevado número de muertes. "La situación de los niños en Gaza es especialmente desoladora", ha resaltado. Entre las conclusiones iniciales, se ha determinado que algunas acusaciones presentadas contra Israel se encuadran en la Convención sobre Genocidio y que los palestinos tienen derecho a protección como grupo. Las medidas cautelares incluyen la obligación de que Israel informe a la corte, en el plazo de un mes, sobre las acciones tomadas para cumplir con las órdenes emitidas este viernes. Eso sí, la CIJ ha evitado solicitar a Israel un alto al fuego para que detenga la ofensiva que ya se ha cobrado más de 26.000 vidas.

Los abogados sudafricanos, respaldados por más de 50 países, presentaron durante las audiencias preliminares de diciembre no solo cifras de fallecidos y armamento utilizado, sino también declaraciones de líderes políticos israelíes que describieron como "retórica genocida", como referirse a los palestinos como "animales humanos". También denunciaron la destrucción de infraestructuras civiles y el desplazamiento forzoso de población.

Como respuesta, Israel tildó la denuncia de "infundada", compartiendo esta opinión con su principal aliado, Estados Unidos. La defensa israelí argumentó que Sudáfrica presentó una versión "profundamente distorsionada" de la realidad y justificó la ofensiva como necesaria para eliminar una "amenaza existencial". Los abogados del Estado judío afirmaron que la guerra estaba dirigida contra Hamás, que controla Gaza, y "no contra el pueblo palestino". Argumentaron que los daños a civiles son comunes en todo conflicto y pueden resultar en "consecuencias no deseadas", culpando a Hamás por las mismas.

Ahora, tras conocer la resolución de la CIJ, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, celebra que no se haya solicitado un alto al fuego pero ha incidido en que el Estado judío hará lo necesario para defenderse. “Como todo país, Israel tiene un derecho inherente a defenderse”, ha manifestado en un comunicado en inglés. “El vil intento de negar a Israel este derecho fundamental es una discriminación flagrante contra el Estado judío, y ha sido justamente rechazado”, según informa Reuters.

La capacidad de la CIJ

La CIJ, principal órgano judicial de las Naciones Unidas, emite sentencias legalmente vinculantes para todos los Estados miembros de la organización. Sin embargo, carece de herramientas propias para la aplicación, lo que ha llevado a que, por ejemplo, Rusia no acatara la orden de detener la agresión sobre Ucrania emitida por el tribunal semanas después del inicio de la ofensiva en febrero de 2022.

A diferencia del Tribunal Penal Internacional (TPI), la CIJ no juzga a individuos, sino que resuelve disputas entre Estados, como en el caso de la demanda de Sudáfrica contra Israel. El caso aún se encuentra en una fase inicial y podría demorarse varios años hasta una sentencia final, sin posibilidad de apelación.

La reacción sudafricana

El Ejecutivo sudafricano ha expresado su satisfacción este viernes por la decisión que insta a Israel a tomar todas las medidas posibles para evitar el genocidio de la población palestina en la Franja de Gaza, considerándolo "un triunfo significativo para el Estado de derecho internacional". Según ha expresado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, en un comunicado, este fallo histórico de la CIJ establece que las acciones de Israel en Gaza son plausiblemente genocidas, fundamentando así las medidas provisionales indicadas por el tribunal.

No obstante, Sudáfrica advierte que no se debe permitir que Estados individuales con derecho a veto obstruyan la justicia internacional, una vez que el fallo sea formalmente enviado al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en una clara referencia a Estados Unidos que ha vetado ha vetado el 90% de las resoluciones que se han hecho desde este órgano contra Israel.

Las autoridades sudafricanas remarcan la obligación de todos los Estados de cesar en la financiación y facilitación de las acciones militares de Israel, que se consideran plausiblemente genocidas. Enfatizan que las medidas provisionales son directamente vinculantes para Israel, instándolo a poner fin a acciones que podrían resultar en un genocidio.

El Gobierno sudafricano concluye el comunicado recordando la difícil situación que enfrentan los palestinos en Gaza. Aseguran, finalmente, que Sudáfrica continuará haciendo todo lo posible para preservar la existencia del pueblo palestino. Como ya dijo el primer presidente de Sudáfrica, Nelson Mandela, “sabemos muy bien que nuestra libertad está incompleta sin la libertad de los palestinos”, un mantra que los sudafricanos no están dispuestos a olvidar.