El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, reitera de manera permanente que su país se defenderá a toda costa de la invasión del Ejército ruso. Para ello emplea la fuerza de su ejército y también la defensa de civiles a los que está incorporando a la resistencia bélica contra Putin. Ucrania ha aumentado el gasto militar colocando al país en el puesto 19 del mundo en gasto militar. Aunque las Fuerzas Armadas ucranianas son importantes en número y medios aún están muy lejos del potencial enorme del ejército ruso.

Cazadores de convoyes

Ante ello se acude a la estrategia de guerra de guerrillas, la incorporación masiva de civiles, de francotiradores y de los denominados 'convoy hunters' (cazadores de convoyes). Estos últimos son parte de la causa del retraso que el ejército del sátrapa ruso está sufriendo en su avance que pensaba que sería un paseo militar. Convoyes de carros de combate y vehículos militares rusos destruidos son los efectos de esta acción de los 'convoy hunters'.

2.000 miembros de unidades especiales entrenados por la OTAN

Los 'cazadores de blindados' que están actuando en el frente norte ucraniano son unidades de élite de aproximadamente 2.000 miembros creados bajo el asesoramiento de la OTAN tras la ilegítima anexión de Crimea por parte rusa. Además de que sus miembros están muy bien preparados y de haber realizado entrenamientos conjuntos con países de la Alianza Atlántica, están bregados y experimentados en otras actuaciones anteriores como la reciente evacuación de Kabul tras el triunfo de los talibanes en Afganistán.

El objetivo de sus acciones es entorpecer el paso de los convoyes de carros de combate rusos y ralentizar su avance. En definitiva, romper la estrategia diseñada desde el Kremlin. Por tanto, son los convoyes de tanques y vehículos militares rusos los que están puestos en los ojos de la diana de estos soldados ucranianos.

'Hit and run': 'pega y corre'

Estas unidades de élite y perfectamente entrenados usan métodos calificados como de 'hit and run', lo que se traduce como 'pega y corre'. Se sitúan en la retaguardia de las tropas rusas y desde ahí infligen daños enormes a los tanques y vehículos que transitan en grandes columnas.

Emboscados y silenciosos atacan en la retaguardia

Ocultos y encubiertos, los convoys hunters dejan que el enemigo pase para luego, desde la retaguardia actuar certeramente. El daño inflingido de esta manera no solo es material y de baja de efectivos humanos, sino que también hay que cuantificarlo en términos psicológicos y de romper la estrategia diseñada en cada momento y escenario. Al no ser acciones previsibles ni regladas, el daño es mayor.

Evidentemente no harán que el potente ejército ruso se doblegue, no, pero mientras el final de la guerra llega, se lo están poniendo más difícil a las tropas invasoras y puede que le estén dando dolor de cabeza a Vladimir Putin y sus estrategas militares.