Bruselas ha tomado una decisión final y se ha desentendido este martes sobre la cuestión del Midcat, dejando la última palabra a España y Francia sobre la construcción del gasoducto. 

"Lo que puedo decir, muy simplemente, sobre esto es que cualquier proyecto de infraestructura transfronteriza adicional que conecte la península ibérica con el resto de Europa debe ser analizado por los Estados miembros involucrados y el promotor", ha manifestado en una rueda de prensa el portavoz de Energía del Ejecutivo comunitario, Tim McPhie.

"Todo proyecto transfronterizo adicional de infraestructuras que unan la Península Ibérica con el resto de la Unión Europea necesita más evaluaciones de los países implicados y de los promotores del proyecto, por eso la Comisión no puede tomar posición", ha insistido el portavoz, que ha recordado que el MidCat no forma parte de la lista de Proyectos de Interés Común (PIC).

Unido a este motivo, McPhie hizo hincapié en que no se pueden financiar proyectos europeos basados en combustibles fósiles, por lo que el Midcat no podría recibir fondos europeos para hacer realidad el transporte de gas, siendo tan solo factibles planes de infraestructuras de hidrógeno.

Francia rechaza el Midcat 

Este cambio de postura viene tan solo un día después de que Francia haya rechazado la propuesta de España. Su presidente, Emmanuel Macron, rompía el proyecto de Pedro Sánchez después de revisarlo sosteniendo que no tiene sentido construir un tercer gasoducto entre ambos países y que es “falso” que el Midcat resuelva las carencias de gas en Europa.

España lleva meses postulándose como la solución más eficaz ante la crisis energética dinamitada por los efectos de la guerra de Ucrania y las ofensivas de Vladimir Putin, convirtiéndose así en el principal exportador de gas a los países miembro con motivo de los cortes de Rusia.

Francia argumenta que no apoya la construcción del gasoducto porque las dos tuberías vigentes que están operativas con España -las del País Vasco y Navarra- están “infrautilizadas” porque se utiliza el 53% de su capacidad desde febrero. Por otro lado, Macron señaló este lunes que Francia necesita “la solidaridad europea con la electricidad” puesto que más de la mitad de sus reactores nucleares están paralizados por cuestiones de mantenimiento.

Rusia cumple su amenaza

Otra de las noticias que ha sacudido a Europa en las últimas horas ha sido el corte de gas a través del Nord Stream por parte de Rusia. Y es que el Kremlin ha dado un golpe sobre la mesa a modo de respuesta de las continuadas sanciones impuestas por la comunidad internacional en un intento de frenar su ofensiva militar en Ucrania. De esto modo, el Gobierno de Putin ha advertido que no levantará la mano hasta que dichas medidas se retiren.