El ministro de Energía de Rusia, Nikolai Shulginov, ha descrito este martes como "altamente improbable" que Europa pueda dejar de lado su dependencia del gas ruso de cara a 2027, en medio de la crisis energética desatada a causa de la invasión de Ucrania, desencadenada el 24 de febrero por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.

"Para lograrlo, deben estar seguros de que podrían hacerlo de cara a 2027", ha dicho, antes de agregar que la situación actual "demuestra que no es algo tan sencillo". "Europa prácticamente no puede recurrir a nadie, excepto a Estados Unidos, que está aumentando la producción de gas natural licuado", ha argumentado.

Así, Shulginov ha explicado que "el próximo invierno demostrará cómo de real es su creencia en la posibilidad de rechazar el gas ruso" y ha apuntado que "esto llevaría a una suspensión de la industria, incluida la química, y la generación de gas", tal y como ha recogido la agencia rusa de noticias TASS.

"Esto sería una vida totalmente nueva para los europeos. Creo que lo más probable es que no logren abandonar (la dependencia del gas ruso), dado que es demasiado insostenible para ellos", ha zanjado, en unas declaraciones concedidas en el marco del Foro Económico Oriental que se celebra en la ciudad de Vladivostok.

El Kremlin culpó el domingo a la Unión Europea (UE) de la paralización de los envíos de gas por el gasoducto Nord Stream 1, al señalar que "los europeos se niegan a hacer el mantenimiento de sus sistemas", medida que tienen que llevar a cabo por obligación de contrato.

Alemania ha cuestionado este razonamiento, al igual que la empresa de fabricación de equipo para gas Siemens, y consideran que estas fugas son habituales y no obligan a paralizar los envíos de gas. Así, Berlín considera que Moscú ha incumplido sus contratos al cesar los envíos.