El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se ha reunido con el presidente del Gobierno en funciones y del PP, Mariano Rajoy, dentro de la ronda de contactos que el conservador está realizando para evaluar su posible investidura. Tras el encuentro, Iglesias ha atendido a los medios en una rueda de prensa en la que se ha centrado en criticar al PSOE y a meter el dedo en la herida de sus debates internos.

“El PSOE tienen que elegir si apoya a Mariano Rajoy, si busca un acuerdo con nosotros o si fuerza las terceras elecciones”, ha asegurado Iglesias cuando le han preguntado qué responsabilidad tendría su formación en unas nuevas elecciones si tampoco apoyasen al líder del PP.

Iglesias ha empezado subrayando que si Rajoy “llega a un acuerdo con el partido socialista ejerceremos el papel de oposición con lealtad al país y a los ciudadanos”. Por si no había quedado claro su intención de arrogarse el papel de oposición, ha incidido en que “si el PSOE se abstiene, el PSOE estaría facilitando en Gobierno de Rajoy y se convertiría en poco menos que en un socio”.

Y ha recalcado que, en ese caso, “el PSOE sería un socio más o menos intenso, nosotros ejerceremos la labor de oposición, con unos principios coherentes”. “Sería difícil de explicar que se es oposición al tiempo que se hace presidente a Rajoy”.

Iglesias ha hurgado en la herida del PSOE varias veces, señalando que dirigentes como “Felipe González, Alfonso Guerra o Josep Borrell y varios barones” han apostado por permitir la investidura de Rajoy. “Cada día que nos levantamos nos encontramos con un nuevo dirigente del PSOE que dice que hay que apoyar a Rajoy. Nos gustaría que el PSOE mirase más a su izquierda y hablase con nosotros”, ha añadido.

Iglesias también ha interpretado su “preferencia por un gobierno de signo progresista” y ha señalado que “cualquiera que sepa sumar y restar se dará cuenta de que podría haber un gobierno progresista en España”. Y, según él, “las fuerzas catalanas y vascas serán partidarias de un gobierno sin Mariano Rajoy”.

Sin embargo, ha vuelto a echar la pelota al tejado socialista: “La iniciativa le corresponde al PSOE y da la impresión de que no la contemplan”. “Estaremos con los oídos abiertos, pero de momento no hemos escuchado nada”, ha añadido.

Una posición que ha mantenido sobre los pactos para formar la Mesa del Congreso y la elección del presidente de la Cámara Baja, pese a que los periodistas le han preguntado por miembros de Podemos que han asegurado estar ya negociando con el PSOE. “No hemos recibido ninguna propuesta. Y creo que nuestro papel con 71 escaños no es un papel de iniciativa, sino de escucha. No tenemos ninguna propuesta”.

La nota de color la ha puesto el propio Pablo Iglesias, que ha llegado a pie con 15 minutos de retraso a la reunión, frente al coche oficial en el que ha acudido Rajoy. Preguntado por la demora, sólo ha respondido “Madrid me mata”. Diferencias también en la vestimenta: Rajoy ha acudido con traje y corbata mientras que Iglesias llevaba vaqueros y camisa azul, además de su habitual mochila. La charla no sólo ha versado de la investidura: también han charlado sobre “la visita de Obama y otras generalidades, como nuestras lecturas”.