Los doce diputados de Vox en la Junta de Andalucía tras las elecciones del domingo han abierto todos los medios de comunicación. Un hecho histórico para la formación de ultraderecha y que ha provocado un miedo generalizado en la población española, ya que desde que Fuerza Nueva obtuviera un escaño en el Congreso allá por 1979 ningún movimiento de extrema derecha había accedido a ningún parlamento español.
Pero no todo el mundo considera a Vox como una fuerza ultraderechista y uno de ellos es Carlos Herrera. En su homilía matutina en Herrera en COPE, el periodista ha instado a sus oyentes a apuntar las fechas del 2 y 3 de diciembre, pues "tienen importantes connotaciones históricas para toda España".
Por otro lado, Herrera reconoce que veía imposible que el PSOE perdiera apoyos en las urnas. "Yo aseguraba que me extrañaba que el PSOE no tuviera voto oculto", señala el locutor mientras indicaba que "se dio el banderazo a un nuevo tiempo político" aunque con "bastantes paradojas".
Un partido transversal
Tras repasar los resultados de las cuatro fuerzas con representación parlamentaria hasta la jornada del domingo, Herrera incidía en Vox. "Irrumpe una fuerza nueva que es el Vox, la gran sorpresa", destacaba el periodista.
Sin embargo, el tratamiento que Herrera le otorga a la formación de Abascal no es el que le da el resto de la población. Y es que para el periodista, Vox no es un partido de extrema derecha, sino "transversal". "Tiene muchas cosas y habrá que analizarla con bastante detenimiento durante todo este tiempo", explica.
Y es que considera que el partido de ultraderecha "ha robado votos a todos, también al PSOE y seguramente a Podemos". Considera que el voto al partido de Santiago Abascal "es un voto de protesta y cansancio" y el que "han alimentado aquellos que le han puesto en el debate político durante la campaña", culpando directamente a Susana Díaz de la irrupción de la fuerza de extrema derecha.
