Las intrigas y peleas internas en el PP no cesan ni en medio de una investigación del calado del caso Kitchen y hay quienes sacan sus dagas para cobrarse viejas deudas, como el exministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, quien no ha dudado en señalar a la Vicepresidencia del Gobierno y al CNI en tiempos de Rajoy detrás de la operación policial para seguir los pasos a Luis Bárcenas.

En una entrevista en La Razón, al ser preguntado por los responsables máximos de la operación Kitchen, García-Margallo no ha negado que el CNI y la vicepresidencia del Gobierno, que encabezaba Soraya Sáenz de Santamaría, pudieran estar detrás. "El tiempo aclarará todo. Será un proceso largo, pero se sabrá", ha dicho el exministro de Rajoy.

La corrupción en el PP

García-Margallo ha señalado que el caso Kitchen es algo de lo que hay que preocuparse en el PP y ha recordado que "la moción de censura y la caída electoral del PP trajeron causa de tres 'ces': Crisis, Cataluña y Corrupción. Además, me preocupa comprobar que la corrupción está lastrando la Marca España en el exterior en un momento en el que necesitamos la ayuda de fuera".

El exministro ha aconsejado a la nueva dirección popular "limpiar el partido de personas que incurran en irregularidades probadas y tomar medidas para que no se repitan".

Defensa de Fernández Díaz

Preguntado sobre si tenía conocimiento de una operación policial para espiar a Bárcenas, García-Margallo ha dicho que "en los cinco años en los que yo estuve en el Gobierno nunca se planteó semejante cosa en Consejo de Ministros, probablemente porque la gran mayoría de los ministros no teníamos competencia en las materias por la que usted me pregunta. Si se trató en reuniones más restringidas lo ignoro completamente".

Sobre el presunto papel de Moncloa y del exministro del Interior Jorge Fernández Díaz en el espionaje, García-Margallo ha hecho una clara defensa de su antiguo compañero de filas: "Jorge Fernández es un ejemplo de lealtad absoluta".