El portavoz del Gobierno valenciano, José Císcar, anunció la decisión en la rueda de prensa posterior al pleno en el que se ha adoptado la medida.  Císcar ha recordado que dicha distinción honorífica se le concedió en 2003, y ha leído el artículo del decreto de creación de ese título que fija que podrá ser revocado "cuando la conducta pública de las personalidades distinguidas sea manifiestamente contraria a los intereses generales o peculiares" de la Comunidad Valenciana.

Embajador honorífico
La retirada del título a Matas fue anunciada el martes por Alberto Fabra cuando se conoció la condena de seis años de cárcel contra el expresidente balear. La distinción de embajador honorífico le fue entregada en 2003, tras su salida del Ministerio de Medio Ambiente y su elección como presidente autonómico, por Francisco Camps, que acababa de crear ese galardón y quiso recompensarle por haber impulsado el trasvase del Ebro a la comunidad valenciana.

Tres años pidiéndolo
El gesto lleva siendo una exigencia de la oposición desde 2009, cuando el PSPV pidió a la Generalitat que le retirase el título a Matas desde que se inició la investigación por el sobrecoste del Palma Arena, tal y como recuerda 20 Minutos.  Pero Camps se negó porque, según explicó su vicepresidente, Vicente Rambla, Matas "no ha sido condenado  por ningún hecho delictivo en virtud de una sentencia firme".

Presunción de inocencia
La imputación llegó poco después, los detalles acerca de la actuación de Matas cada vez eran más escandalosos e incluso se le invitó desde Génova a abandonar el partido. Pero aún así, Camps se negó una y otra vez a retirarle el título de embajador honorífico, quizás sabedor de que no llevar la "presunción de inocencia" hasta el final podría perjudicarle a él, que también estaba teniendo problemas con el caso Gürtel.

"Imputado por nueve delitos"
El pasado 4 de febrero fue la última vez que los socialistas valencianos le pidieron a la Generalitat que quitase semejante honor a Matas. La diputada Carmen Ninet recordó a Fabra que "el señor Matas está imputado por nueve delitos relacionados con la corrupción, entre ellos prevaricación, cohecho, malversación de fondos y apropiación indebida, ligando sus actuaciones con la imagen la Comunitat y la honradez y la honorabilidad de las valencianas y los valencianos".

¿Un mensaje a Camps?
Pero ha sido ahora, aunque la sentencia no es "firme" ya que puede ser recurrida al Tribunal Supremo, cuando Alberto Fabra ha decidido actuar, alegando que su filosofía se basa en que quienes no entienden la política como una vocación de servicio público, "no tienen cabida en este partido". El presidente valenciano se marca así un tanto, pero sobre todo manda un mensaje de cara al próximo Congreso del PP regional, donde aún no tiene asegurada su victoria mientras Francisco Camps sigue meditando si intenta retomar su trono.