La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo (i). EFE/Archivo La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo (i). EFE/Archivo



El empresario Enrique Ortiz, propietario del Hércules CF pactó de manera encubierta con el exalcalde de Alicante Díaz Alperi (PP) la recalificación de los terrenos del estadio del equipo futbolístico y sus alrededores en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), con la pretensión de ceder después al Ayuntamiento esa zonas a cambio de 75.000 metros de suelo en la zona más cara de la ciudad, La Condomina.

Compró los terrenos porque sabía que serían recalificados
Esas son las conclusiones a las que han llegado los investigadores del caso Brugal, en el que están imputados el empresario, el exalcalde Alperi y su sucesora, la actual alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo.

Ortiz habría comprado el estadio y los terrenos anexos en abril de 2007, seguro de que ese suelo sería recalificado en el Plan urbanístico de la ciudad, gracias al acuerdo del empresario con el entonces alcalde. Un acuerdo que se hizo extensible a la actual regidora, Sonia Castedo.

El informe donde quedó plasmado el plan
El empresario encargó a un despacho de abogados, al que pagó 7.000 euros un dossier en el que quedó plasmado su plan, y que está recogido en el sumario del Caso Brugal, según El Mundo.

El documento es anterior al PGOU
En ese informe se refleja que Ortiz planeaba pedir al Ayuntamiento 75.000 metros cuadrados en La Condomina para levantar pisos y una ciudad deportiva. El documento está fechado el 12 de febrero de 2010 y es anterior a la segunda revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alicante.

Foto publicada por El Mundo en la que se puede ver a la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y su concejal de urbanismo, Marta García Romeu, en una fiesta del pijama junto al empresario Enrique Ortiz



Las pruebas de la relación de Castedo con  Ortiz
Sonia Castedo está imputada en el caso Brugal por beneficiar a Ortiz, presuntamente, con el Plan General de Ordenación Urbana. Se le imputan delitos de cohecho, tráfico de influencias y revelación de información privilegiada y se le acusa de haber recibido regalos por parte del empresario, con quien mantenía una relación de amistad, según han demostrado múltiples conversaciones grabadas y pruebas gráficas.