Con la financiación singular para Cataluña y el Congreso Federal del PSOE, parece que la política a corto plazo se va a mover en los territorios. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, lo sabe, y da libertad a sus barones para adelantar elecciones sus autonomías. Fuentes cercanas al gallego consultadas por ElPlural.com admiten que “la competencia es de los presidentes” y que la respetan “al 100%”, aunque señalan que “nunca se haría en contra del PSOE”. “Si en algún territorio se llevara a cabo sería siempre en busca de mejorar la estabilidad tras la salida de Vox de los gobiernos y no en detrimento de ningún partido”, añaden en un nuevo dardo al partido de Santiago Abascal.
Sin embargo, en política todo pasa por algo. Además de tratarse de una ciencia que ha de erigirse como baluarte para mejorar la vida de las personas, como defienden las voces que han contestado a este medio, la estrategia juega un papel fundamental, y en estas no hay que perder de vista el escenario en el que nos encontramos. Por un lado, la gestión de fondos para Cataluña -un tema muy territorial que ha centrado las críticas de los ‘populares’-; por otro, el Congreso Federal de los socialistas, que llega en un momento en el que al partido le cuesta exhibir fuerza en lugares como Madrid, Andalucía, Castilla y León o Aragón, con representantes conservadores muy arraigados (Isabel Díaz Ayuso, Juanma Moreno Bonilla, Alfonso Fernández Mañueco y Jorge Azcón).
Los planes de Pedro Sánchez a nivel interno pasan por la renovación de los barones en estos cuatro territorios, ahora Juan Lobato, Juan Espadas, Luis Tudanca y Javier Lambán; también por plantar cara a Miguel Ángel Gallardo en Extremadura. Pero esto requiere de unos plazos y aquí todo el mundo juega con el tiempo, lo que podría llevar a pensar que en Génova estudian anticipar la llamada a las urnas en alguno de sus territorios fuertes. La jugada no sería baladí, pues si bien es posible que no debilite la imagen de Sánchez a título personal -su aura como líder es innegable- sí que dificultaría el rearme del principal partido del Ejecutivo, una cuestión que quien sabe si podría tener consecuencias en los comicios generales.
¿Dónde es más factible una llamada a las urnas anticipada?
El discurso del PP para esto no es complicado, ya que la financiación de los territorios sería la excusa perfecta ahora que el acuerdo entre PSOE y ERC para investir a Salvador Illa como president de la Generalitat acaba de salir del horno. Si se pone este tema en el centro, el hipotético del adelanto electoral se extiende a otros lugares. De hecho, algunos dirigentes de Ferraz no tachan de imposible que se puedan producir elecciones anticipadas en Castilla y León, Murcia o incluso Extremadura. Mucho más complicado resulta que el escenario se plantee en lugares como Madrid, donde, a pesar de las constantes críticas de Ayuso, la financiación no es una cuestión que pueda afectar, precisamente, a la capital de España. Y el PP tampoco tendría necesidad, analizando mínimamente, de atacar por ahí.
Sea como fuere, todo va a depender de lo que decidan los barones, pero Feijóo no se opone a que alguna parte de nuestro país sea llamado a las urnas antes del plazo que le corresponde. Así se lo han explicado a este medio las fuentes consultadas, aunque aseguran que no se trataría de nada personal con el PSOE.
Congreso Federal del PSOE
Los socialistas celebrarán su Congreso Federal entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre. Se trata de una fecha marcada en rojo por el calendario ante las posibles transformaciones que se produzcan en el seno de las labores orgánicas. Asimismo, servirá para apuntar a las primarias autonómicas que deberían celebrarse, según los propios estatutos del PSOE, no más después de tres meses después de esta cita.
Con ello, posteriormente al evento que tendrá lugar en Sevilla, los territorios tendrán que organizar sus congresos autonómicos como mucho en febrero. Los socialistas dispondrán, por lo tanto, de tres meses para dar forma a un reparto e intercambio de cromos para recuperar músculo en aquellos territorios en los que, considera, lo ha perdido.
El juego está sobre la mesa. Apenas unas horas después de que el PSOE confirmase la fecha oficial del Congreso Federal, los lugares en los que el partido ha perdido fuelle se pusieron a trabajar. Prueba de ello es que Lambán -uno de los más críticos dentro del partido con la financiación catalana- anunció que acudiría personalmente a la capital hispalense. Lo mismo que Juan Espadas, responsable socialista precisamente en la comunidad del sur.
En la misma línea, Juan Lobato no tardaba en solicitar un apoyo a futuro. “Te pido fuerza, apoyo, ilusión y tu compromiso para conseguirlo. Si te sumas a este proceso, aquí me tienes. Cuenta conmigo”, decía en una carta a la militancia que es quien, en palabra de estos barones, debe decidir.