El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, es el eje de todas las miradas. Señalado por su actuación en las perpetuas hostilidades con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y por Cayetana Álvarez de Toledo en su libro Políticamente indeseable. La exportavoz parlamentaria del PP le ha acusado de practicar “mobbing” y “bullyng” contra ella, pero la mano derecha de Pablo Casado, preguntado por los periodistas, ha decidido evadir la polémica.

Preguntado por los periodistas a su llegada al desayuno informativo organizado por Fórum Europa, al que, por cierto, no ha asistido finalmente Ayuso, el secretario general del PP se ha limitado a echar balones fuera al respecto. “Me parecen lo mismo que a usted”, ha respondido a la pregunta de un periodista sobre los pasajes que protagoniza en el libro de Álvarez de Toledo.

Precisamente este mismo jueves, la otrora portavoz parlamentaria del PP presentará una obra plagada de dardos no sólo a Teodoro García Egea, sino también a Pablo Casado. Álvarez de Toledo ya dejó a todos absortos cuando, en la entrevista concedida al diario El Mundo, señaló públicamente a su secretario general por practicar “mobbing” y “bullying” contra ella.

La hispano-argentina describe el “acoso impúdico” que ha sufrido a través de los “alfiles” que Egea movía a su antojo contra ella, con el objetivo de tomar el “control del grupo parlamentario”. Críticas y acusaciones de este calibre proliferan en las páginas de su libro.

Álvarez de Toledo describe su destitución “a cámara lenta” como un proceso en el que “se combinaron los groseros empujones de Teodoro con los suaves empujoncitos de Pablo”. “De estos últimos, el más sibilino fue mi exclusión de la Comisión de Reconstrucción”, atestigua la ex portavoz parlamentaria, al tiempo que censura las maniobras de Génova contra Ayuso.

Amenaza de multa

En sus declaraciones públicas, Álvarez de Toledo ha censurado que el PP exija la "despolitización" del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) pero luego "politice el Tribunal Constitucional". "El enjuague es desolador. Yo voté en blanco", añadió la diputada por Barcelona.

En la charla con el periodista Rafa Latorre admite que se abstuvo en la votación de Enrique Arnaldo porque el “reparto de cromos” le resulta “desolador”. Álvarez de Toledo estima que el acuerdo con los progresistas infiera directamente en el relato de los populares, calificando la decisión adoptada como “autoimpugnatoria” y “contraproducente” para los intereses de su partido. En definitiva, un “espectáculo desolador”.

Como hicieran – y anunciaran previamente – diputados de otro signo político, Cayetana Álvarez de Toledo, “verso libre” como la definen algunos en su bancada, se saltó la disciplina de partido a pesar de que le sobrevuele la amenaza de algún tipo de sanción.

Precisamente sobre esto ha opinado este martes la actual portavoz del PP en el Hemiciclo, Cuca Gamarra, quien además ha admitido que no se ha leído el libro de su predecesora porque está centrada en los “muchos” y “graves problemas” que conciernen a los “españoles”.

La portavoz parlamentaria del PP se ha limitado a decir que en el partido existen una serie de “mecanismos” que funcionan “para todos por igual”. Ante la ausencia de una respuesta conclusiva, por el momento sopesan la opción de sancionar la diputada hispano-argentina.