Albert Rivera vive sus momentos más difíciles desde que llegara a la cúspide ciudadana. El líder de la formación naranja ha visto cómo miembros fuertes de su partido han hecho mutis por el foro debido a su cordón sanitario a Sánchez y los coqueteos con Vox. Las dimisiones de Roldán, Nart y Vázquez han desatado una crisis interna sin parangón en la formación, lo que ha llevado a la derecha mediática a abrir un debate sobre su “autoritarismo” al frente de Ciudadanos.

Así de duro se ha mostrado el diario ABC con el presidente del partido liberal. Describen a Ciudadanos como un partido “en estado de confusión al que atenazan sus propias contradicciones”. Consideran que está sometido a presiones para que no bloquee la investidura de Pedro Sánchez – similar a lo que destila el editorial de El Mundo – y aprovechan para analizar la pérdida de apoyos en Cataluña, pese al cacareado crecimiento.

Autoritarismo interno

El editorial de ABC repasa las dimisiones de Roldán, Nart y Vázquez para aludir al “malestar orgánico” de Ciudadanos, cuyo origen lo sitúan en la “rebeldía” de Manuel Valls. “Ciudadanos pierde cierto aura de pluralidad ideológica y Rivera ve incrementados sus problemas porque lo que se empieza a intuir al fondo es una discusión sobre su autoritarismo en el manejo del partido”, sentencian con rotundidad.

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Deslizan la “constante intransigencia sobreactuada” del líder de Ciudadanos y la “consolidación de una apuesta política personalísima para liderar la derecha en España” como principales causas de esta crisis interna en el “partido unido”. También destaca que los críticos de Rivera no dijeron nada en campaña, momento en el que los liberales adoptaron el “no es no” a Sánchez casi como lema de campaña.

Del ‘no es no’ al ‘puede ser’

El Mundo se muestra algo más indulgente que sus compañeros de la derecha mediática. Consideran que Ciudadanos está pagando los costes de “su estrategia de competición por liderar el centroderecha”. Sin embargo, ellos deslizan con mayor vehemencia la existencia de “una campaña orquestada” para que Rivera cambie su “no es no” por un aperturismo hacia Sánchez.

Eso sí, El Mundo defiende a Rivera cuando critica “maniobras como la de Navarra”. No obstante, considera que “si existiera un resquicio sincero para el entendimiento constitucionalista, en aras de la estabilidad y la moderación, Sánchez y Rivera deberían explorarlo con valentía por el bien de todos”.

Ciudadanos se debilita

Esta es la idea que remarca El País tras lo ocurrido en la jornada del martes. El periódico de PRISA, otrora defensor número uno del presidente naranja, desliza que Albert Rivera salió victorioso de la Ejecutiva después de una mañana con la dimisión de Roldán resonando en Alcalá 253 sin cesar. La votación solicitada por Garicano y Nart para cambiar de estrategia supuso una victoria interna para Rivera, pero una nueva herida de difícil cicatrización para el partido.

Resaltan el “ensimismamiento” en el que viven tanto el líder de Ciudadanos como sus correligionarios más directos en el organigrama interno. Critican también que “Rivera ha guardado silencio” tras los insultos de Vox a Dolores Delgado. “Cabe preguntarse el porqué de su empeño en exponer todo un país al oscurantismo de sus innecesarios aliados”, puntualizan.