Resumen de gestión: pago por medicamentos, fin de la ayuda a los dependientes, copago por uso de ambulancias, inmigrantes sin antención sanitaria. Situación: oleada de protestas de trabajadores sanitarios y de pacientes. Ana Mato, ministra de Sanidad, no da la cara, está muda y ausente mientras otros dirigentes del PP se baten el cobre ante el euro por receta, privatizaciones y huelgas.

¿Dónde está la ministra de Sanidad, Ana Mato? ¿Tiene algo que decir sobre el doble copago farmaceútico aprobado por el Gobierno del PP en Madrid con el euro por receta? ¿Algo que opinar sobre el cierre patronal de farmacias en la Comunidad Valenciana ahogada por los impagos del gobierno de la Generalitat, también del PP? Ana Mato lleva semanas desaparecida, no se sabe si por voluntad propia o por orden de Moncloa, que teme sus meteduras de pata. Y hasta hace unas semanas su respuesta para todo era solo una: la culpa de absolutamente todo era la herencia del PSOE.

¿Herencia socialista en Madrid y Valencia?
El PP lleva gobernando prácticamente dos décadas con mayoría absoluta tanto en la Comunidad de Madrid como en la de Valencia. Y la gestión de la Sanidad es competencia de las Comunidades Autonomas, por tanto en estas dos Comunidades la única herencia de la que hablar es de la herencia del PP, porque con la misma herencia de Zapatero en Andalucía no se privatizan hospitales y se paga a las farmacias (con retraso pero se les paga). En Madrid se privatizan los hospitales y en Valencia ya hay 200 farmacias en suspensión de pagos porque la Generalitat del PP no paga sus deudas. Puede que el silencio de Ana Mato se deba a que sus asesores le están buscando un nuevo discurso.

Rajoy tiene que dar la cara
El PP en Madrid, en Castilla La Mancha y probablemente no tardando mucho en Valencia, ha impuesto por las bravas un cambio de modelo sanitario. Ha roto con un consenso básico de la Transición, la apuesta por la sanidad pública. Y con la excusa de la crisis van directos a la privatización y el copago en todo.

La apuesta más salvaje es la del PP de Madrid. El heredero de Esperanza Aguirre, Ignacio González, ha sacudido los pilares del Estado del Bienestar con el anuncio de la nueva tasa farmaceútica, el euro por receta que se suma al copago impuesto por Ana Mato, y ha anunciado privatizaciones de hospitales públicos en todas sus áreas (sanitaria, administrativa y de servicios).

Han tenido que dar la cara la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santa María, y el propio presidente, Mariano Rajoy, quienes han dicho que no les gusta el euro por receta. De las privatizaciones de hospitales y el cierre de farmacias por impago de gobiernos del PP no tenemos respuesta.