Primera reunión, primer intento y primer fracaso. Así ha quedado este miércoles la reunión de Podemos en la que se iban a tratar las propuestas políticas para Vistalegre II en busca de una “unidad” necesaria tras choques y enfrentamientos públicos. Finalmente, la reunión ha terminado sin acuerdo y con un nuevo cruce de palabras entre Errejón e Iglesias.

En este ambiente, el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, ha avisado al líder del partido, Pablo Iglesias, de que los acuerdos de cara a la asamblea "no se decretan" y que “la unidad no se puede construir a golpe de corneta”, conseguir esto sólo es posible desde la "diversidad".

"De la reunión de mañana pueden salir muchos acuerdos, pero el acuerdo no se decreta, sino que sale de la diversidad", decía Errejón ayer. Unas palabras que hoy siguen teniendo actualidad si se tiene en cuenta que no se ha llegado a ningún acuerdo entre las 20 personas de los 13 equipos diferentes allí presentes.

Según ha explicado Errejón a la salida, este encuentro sólo ha sido "una ronda de expresión de documentos", una idea que apoya el líder de AnticapitalistasMiguel Urbán, que ha defendido que la intención de todos no era salir con un acuerdo.

Errejón y sus declaraciones agresivas

Parece que las palabras de Errejón no han sentado nada bien a Iglesias. De hecho, este último ha acusado a su amigo de hacer declaraciones “agresivas” y "hablar mal" de un compañero.

Iglesias tiene otra idea de cómo se consigue la unidad y pasa por “el debate”. "La unidad se consigue debatiendo, ni con documentos ni haciendo declaraciones agresivas en los medios, se consigue con el debate y creo que hoy se han aportado ideas interesantes".

Y para Garzón no hace falta la fusión

Gran parte de los enfrentamientos entre los dos pesos pesados de Podemos derivan de la creencia o no de que IU debería unirse a Podemos. Teniendo en cuenta esto, chocan más las palabras de este miércoles de Alberto Garzón.

El coordinador general de IU ha admitido que los debates internos de sus "aliados" de Podemos afectarán a Izquierda Unida, pero ha asegurado que no contemplan "de ninguna manera" una fusión, porque es innecesaria, y se ha mostrado convencido de que los ciudadanos les respaldan.