Alberto Núñez Feijóo gana perdiendo. El líder del PP ha ganado las elecciones generales en escaños pero la suma de los votos con Vox no les da para tener una mayoría absoluta que permita al Partido Popular gobernar ni en solitario ni con los ultraderechistas. Un giro en las urnas que no se esperaban en Génova y que pone más cerca de Moncloa a un nuevo ejecutivo de Pedro Sánchez en una coalición con Sumar apoyada por las fuerzas de izquierdas. Así, el dirigente popular vence en los comicios pero las urnas dejan la puerta abierta a que vuelva a gobernar el PSOE, por lo que no es un buen resultado para la plana mayor de Génova.

El Partido Popular apela ahora al aumento de los apoyos con respecto a los comicios del año 2019 dado que han avanzado en 47 puestos, hasta colocarse en los 136 escaños. Eso sí, debido a la absorción de gran parte de Vox, que desciende de los 52 asientos en el Congreso de los Diputados a solo 33, lo que les aleja de forma conjunta de la mayoría absoluta, marcada en 176 puestos. En este escenario, la cúpula insiste en defender la gobernabilidad de la lista más votada, que se distancia de los socialistas en a penas 200.000 votos, muy lejos de las cábalas de los populares, y avisan de su intento de gobernar frente a EH Bildu.

Feijóo gana pero no suma

Un recuento de infarto. Así se ha vivido la fiesta de la democracia este 23 de julio, que ha dejado una resistencia de los socialistas frente a una victoria agria para los populares. El Partido Popular sube, pero no tanto como esperaban en las últimas semanas de una campaña electoral que no ha sido especialmente beneficiosa para Alberto Núñez Feijóo. Las mentiras del cara a cara en Atresmedia con Pedro Sánchez, las siguientes "inexactitudes" en entrevistas y las continuas salidas de tono desde entonces han mermado los aires de victoria de Génova, que siempre ha dejado la puerta abierta a negociar con Vox para ostentar la presidencia. 

Enfrente, la izquierda. Los últimos días de campaña han insuflado un soplo de alegría para los socialistas y los de Yolanda Díaz, que ha obtenido 31 escaños. Son siete menos que la conjunción de Unidas Podemos pero muy favorable para los fucsias, que esperaban rozar la treintena de asientos. Además, el PSOE aguanta. Pese a que se daba por muerto políticamente a Pedro Sánchez tras el golpe de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo y el adelanto electoral, el líder socialista ha alcanzado los 122 escaños, dos más que en los comicios de 2019 y se mantiene como líder socialista indiscutible.

Una victoria amarga para el PP: Feijóo no gobierna

Con todo esto, ha sido una mala noche para el PP. Los barones y la séptima planta de Génova calculaban un éxito cercano a los 150 escaños y airearon una victoria muy contundente antes de tenerla. Ahora, los populares se aferran a su tibio triunfo y anuncian el intento de gobernar que van a emprender a partir de este 24 de julio. "El PP sube más de 45 escaños y la coalición de Gobierno pierde 5. Por tanto Feijóo reivindicará su derecho a formar Gobierno y pedirá al resto de partidos que, como es habitual en democracia, permitan la investidura del candidato que ha ganado las elecciones", esgrimen fuentes populares.

A su juicio, la gobernabilidad pasa por Feijóo "o por el sí expreso de Bildu", por lo que reivindican el "compromiso para Feijóo" que dicen tuvo el dirigente popular en Vitoria. "El objetivo, restar capacidad de decisión a la izquierda abertzale", aseguran. Sin embargo, cabe destacar que estos pactaron con los abertzales en el ayuntamiento vasco para repartirse las concejalías, una decisión muy criticada y que precipitó su paso hacia detrás para intentar no salir perjudicado de este movimiento, calificado como "pacto". Con todo insisten en recordar que "nunca este país hizo presidente a quien había perdido las elecciones".

"Tranquilidad" antes del caos

A escasos minutos del cierre de los colegios electorales, en torno a las 20:00 horas, el Partido Popular se mostraba en calma. Tanto en los exteriores como en el interior de las paredes de Génova se podía notar una tensa quietud solo rota por el inicio del escrutinio. Fuentes de la formación aseguraban en esos instantes ante ElPlural.com estar "tranquilos" e incluso lanzaban comentarios jocosos bajo la cuestión de "por qué no tendríamos que estarlo". Sin embargo, los ánimos denotaban cierto nerviosismo ya que los datos manejados a esa hora únicamente correspondían a los últimos sondeos y no a los resultados reales. 

Cabe destacar que a la misma hora el 28 de mayo, en la celebración de los comicios autonómicos y municipales en los que la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no solo revalidó el cargo sino que lo hizo con más fuerza -aunque no con más distancia con respecto al PSOE-, las sonrisas y la euforia eran notables, algo que esta vez en Génova se ocultaba tras la "prudencia". No ha sido hasta las 20:40 pm pasadas cuando Feijóo ha llegado a la sede y se han producido las primeras valoraciones del desarrollo de la jornada a manos de Cuca Gamarra, que ya se mostraba optimista pero cautelosa.

"El PP recupera la primera fuerza política"

"Sabemos quién es la única fuerza que ha subido pero hay que esperar a ver la voluntad de los españoles", ha manifestado en su primera intervención desde la sede con especial tranquilidad en apelación al resultado de los escrutinios. Por eso, ha sostenido "con toda la prudencia lógica" que creen que "va a ser una gran jornada electoral". "El PP va a recuperar la primera fuerza política. La última vez fue en el 2015, y porque el PP y Feijóo es el único candidato que se presenta en todas las circunscripciones en las que ha subido el resultado", ha celebrado antes de percutir en la "prudencia". 

Cuestionada por si los populares están "preocupados" por un posible giro tras hacer el recuento de los votos por correo y la necesidad de pactar con Vox, Gamarra reduce marchas. "Se acaba de iniciar el conteo y las valoraciones de más calado tocará hacerlas cuando haya más datos oficiales. Lo que queríamos trasladar es lo que ya sabemos todos y de lo que estamos contentos. Va a ser una buena noche electoral", ha dicho con tibia contundencia ante los medios de comunicación en la sala de prensa. Ahora, con casi el 98% escrutado, la llave la tiene Junts per Catalunya, si opta por ayudar a Feijóo o facilitar un gobierno progresista.