Una semana después de anunciar que dejaba su escaño como siputada del PP acorralada por las grabaciones en las que se la escuchaba pedir al excomisario Villarejo espiar a rivales y conseguir información clave de la Gürtel, María Dolores de Cospedal ha hecho oficial su renuncia. Pero también, ha comenzado a mover las piedras necesarias para construir su futuro.

La que fuera secretaria general del PP ha solicitado este jueves su reingreso como abogada del Estado en algún ministerio o en un organismo oficial, pues su deseo es quedarse en Madrid.

Lo más llamativo es que Cospedal ha pedido su plaza como Abogada del Estado, únicamente, para la Comunidad de Madrid. En el caso de que hubiera una vacante en Castilla-La Mancha, comunidad de la que fue presidenta, la popular podría pensárselo o no la aceptaría y eso que es allí donde está su residencia.

De abogada a ministra de Defensa

Cospedal es licenciada en Derecho por la Universidad CEU San Pablo de la capital. En 1991 entró al Cuerpo Superior de Abogados del Estado y, un año después, comenzó a trabajar como abogada en el Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente.

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Posteriormente, entre 1994 y 1996 fue abogada del Estado dando servicios jurídicos a otro ministerio, en este caso al de Asuntos Sociales. No fue hasta un año después cuando entró en el gabinete técnico del Ministerio de Trabajo de la mano de Javier Arenas y en el Gobierno de José María Aznar.

Desde aquí, hasta convertirse en presidenta de Castilla- La Mancha, secretaria general del Partido Popular durante una década y ministra de Defensa con Mariano Rajoy. La cúspide de su carrera política que acabó cuando se publicaron las cintas de Villarejo.

Ahora, Cospedal volvería a ser abogada del Estado, pero primero debe conocer si en algún organismo público o ministerio hay un puesto libre de su nivel; es decir, del 30, que se corresponde con el más alto dentro de la Administración.

Javier Arenas y María Dolores de Cospedal en una imagen de archivo.

El final de su carrera política empujada por Rajoy

“Hoy dejo mi escaño”. Con estas cuatro palabras escondidas entre cuatro páginas de comunicado, Cospedal anunciaba que dejaba su escaño a principios de mes.

Pero su anuncio no era casual. Se producía sólo unas horas después de que Mariano Rajoy y el líder del PP, Pablo Casado, desmintieran a su marido y se demostrase públicamente que Cospedal ya no tenía la confianza de sus líderes.

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Su marido, Ignacio López del Hierro, aseguró que el expresidente Mariano Rajoy estaba al corriente de los trabajos encargados por Cospedal al excomisario Manuel Villarejo, ahora en prisión. "Su jefe está de acuerdo en que se desarrolle esa línea de actuación", afirmó López del Hierro.

Horas después, Cospedal anunciaba con un comunicado en Twitter que dejaba su escaño cómo diputada para “liberar al Partido Popular de cualquier ataque, por muy injustificado que este sea”.