El discurso monótono y aburrido con el que Mariano Rajoy ha pedido el apoyo del Congreso ha sido muy criticado por la mayoría de los partidos. Lo curioso es que algunos ya lo venían venir, por lo menos Diego Cañamero, el diputado de Podemos que se estrena en la Cámara en esta legislatura. Cañamero llegó al hemiciclo bormeando con que con tal de no tener que escuchar a Rajoy "es capaz de votarle". El diputado llegó además con una camiseta con el eslogan "Cero privilegios".

Margallo dice que el pacto con C's "rezuma transición"
Otros diputados también expresaron los que esperaban del debate. El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, espera que el PSOE abandone la postura que mantiene de "autismo moral" para poder salir de la situación de bloqueo institucional y que el gobierno se ponga en marcha. García-Margallo, antes de comenzar la primera sesión de investidura de Mariano Rajoy, cree que ya se ha dado un primer paso en la "buena dirección" con el acuerdo firmado con Ciudadanos que "parece que rezuma mucho aire de transición, mucha reforma y mucho centrismo". 

En el PNV bromean sobre la presión que sienten 
Desde el PNV, su portavoz, Aitor Esteban, ha vuelto a dejar claro que su grupo votará "no" a la investidura de Rajoy y ha subrayado que no se siente presionado por el hecho de que un cambio en su voto allanaría también el camino a la formación de Gobierno: "fíjese que presión siento, que casi floto", ha replicado.

Toni Cantó, diputado de Ciudadanos, no quiere ver la sesión de hoy como de "puro teatro", pese a estar abocada al fracaso, pero piensa, no obstante, que es un trámite que "hay que pasar". En cambio, el portavoz de Convergencia, Francesc Homs, sí piensa, "sin ninguna duda", que es un teatro el programa acordado entre PP y Ciudadanos, ha dicho a los periodistas. Para el portavoz de ERC, Joan Tardá, la sesión de hoy es para escuchar lo que dicen "las derechas" tras ponerse de acuerdo "y ver cómo lo celebran".

Y el líder de Compromís, Joan Baldoví, ha puesto la pelota en el tejado del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, afirmando que a partir del viernes, tras decir "no" a Rajoy dos veces, tendrá que plantearse un "sí" a un gobierno del cambio y determinar si quiere liderar esa alternativa.