"He venido al Senado a comparecer para defender la amnistía, el referéndum de autodeterminación de Cataluña como resolución del conflicto político y para defender Cataluña, la de todos los catalanes y catalanas independientemente de lo que piensen. Quieren vivir en paz y justicia". Con estas palabras ha comenzado su discurso desde el estrado de la Cámara Alta el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ante los barones del Partido Popular, convocante de la Comisión de Presidentes Autonómicos. En catalán y abriendo la sesión, el dirigente independentista ha acusado a esta formación de "utilizar Cataluña para las batallas partidistas" así como de "volver al anticatalanismo para desgastar al adversario" electoralmente. El president ha sostenido que a los de Alberto Núñez Feijóo "no les importa" la región y la he recordado los indultos de los Gobierno populares, como de Jose María Aznar. 

Aragonés acusa al PP de "utilizar Cataluña"

Como era de esperar, el máximo dirigente del Govern de la Generalitat ha pronunciado un discurso conciso y con un objetivo claro: defender la necesidad de aprobar una ley de amnistía y apuntalar la idea de que esta no es un paso único sino inicial para avanzar en el referéndum de autodeterminación en la región. Pero también ha aprovechado para cargar con dureza contra el Partido Popular, que ha utilizado su mayoría en el Senado para montar una pasarela a sus presidentes autonómicos entorno a un debate sin final, el de la amnistía. "El objetivo real no es otro que utilizar Cataluña para las batallas partidistas del Estado. Volver al anticatalanismo para desgastar al adversario", ha sostenido el president catalán, que ha afirmado que a los populares "no les importa las aspiraciones, voluntades y anhelos de los catalanes".

Cataluña votará en un referéndum, estoy seguro

"Si les importara hablarían del déficit fiscal anual de la región, que limita los recursos para escuelas, seguridad, cultura… recursos que pagamos en impuestos y no tenemos la capacidad de disponer de ellos", ha continuado Aragonés apuntando también a los problemas de transporte, en referencia a los Rodalíes, así como a las "violaciones del Tribunal Constitucional" con decisiones que toma el Parlament o a la "promoción de la lengua catalana". "En definitiva, si les importara Cataluña la escucharían, querrían saber qué pensamos, con toda su diversidad ideológica, cultura y de orígenes, pero también a sus consensos", ha dicho. Todo para apuntar a que una "amplia mayoría" de la comunidad autónoma "quiere resolver el conflicto entre Cataluña y España votando en un referéndum".

Así, ha insistido en que los populares, o la derecha española, utiliza a la región para "sus peleas políticas". Sin embargo, también ha querido mandar un mensaje a los "españoles que aman Cataluña, valoran lo que somos, y que con ellos existen lazos fraternales". "Cataluña mira el futuro compartido, es una nación que quiere una sociedad cohesionada a través de los derechos y las libertades. Lo sabemos todos aunque algunos no lo quieren reconocer. No es mejor ni peor, pero quiere ser plenamente responsable de su futuro con paz, libertad y todas las opciones en democracia", ha afirmado antes de ir directo a su objetivo: reivindicar la ley que está pactando Esquerra Republicana con el Gobierno de Pedro Sánchez en el marco de las negociaciones para la investidura del candidato socialista. 

La amnistía como "punto de partida"

Aragonès ha criticado la "persecución" que dice han emprendido los distintos gobiernos de los populares contra los catalanes "por haber ejercicio su derecho a decidir", en referencia al 1 de octubre, así como a su intención de "acabar con la causa general del independentista". Así, ha sostenido que la amnistía no es solo un "paso imprescindible" sino "un punto de partida para aportar soluciones donde otros han puesto represión", al igual que lo es "liberar a los presos políticos" o suprimir el delito de sedición. Todo con un destino conciso, "que la ciudadanía vote sobre su futuro político" con la condición de que esta cita sea "reconocida" y para la que esténn llamados los ciudadanos catalanes, tal y como se ha producido en Escocia, ejemplo que ha puesto el propio dirigente republicano. 

En ese momento de su intervención, que ha contado con un tiempo máximo de diez minutos como el resto de presidentes regionales, ha vuelto a cargar contra el PP, en este caso por los indultos llevados a cabo por algunos de sus gobierno. "Nos convocan en el Senado para intentar tumbar la amnistía. Se escandalizan pero no lo hicieron ante los 6.000 indultos de los distintos gobiernos de Felipe Gonzalez ni ante los otros 6.000 de Aznar, que beneficiaban a condendos por corrupción, de meterse el dinero en el bolsillo", ha afirmado antes de recordar la ley que aprobaron y apoyaron para impedir investigar los crímenes de sangre durante el franquismo. Pero Aragonès ha sostenido a modo de envite que la región que dirige "irá hacia delante y seguirá su camino".

"Queremos dejar atrás el conflicto que ganamos democráticamente para garantizar las escuelas, la sanidad, mediombiente, igualdad… Algo que Cataluña se merece y todos los pueblos merecen. Queremos mirar hacia delante asumiento todas las responsabilidad. Cataluña votará en un referéndum, estoy seguro, y lo hará por voluntad, perseverancia, democracia. Siempre con la mano tendida y las manos libres. Visca Catalunya". Una frase para finalizar que ha sido atendida por lo populares, también por Vox -que se ha quedado en la sala a escucharle- y que ha sido su último pronunciamiento desde el estrado antes de salir a la carrera del edificio. Corriendo y con una nube de periodistas detrás que intentaban lanzar alguna pregunta al dirigente catalán o tomar alguna imagen para tomar el pulso de su valoración del encuentro, del que ya se sabía desde el miércoles que no iba a ver finalizar.