Tan solo unos días después de que Scarlett Johansson haya demandado a Disney por el lanzamiento de Viuda Negra en su plataforma, el actor británico Gerard Butler ha hecho lo propio contra la productora de la película Objetivo: La Casa Blanca, a los que les reclama 10 millones de dólares.

El film protagonizado por Butler recaudó más de 172 millones de dólares desde su estreno en el año 2019 en los cines. Sin embargo, ahora -dos años después- el intérprete asegura que no ha cobrado lo que le correspondía, por lo que ha demandado a la compañía Nu Image/Millennium Films, según ha recogido Variety.

En concreto, asegura que le deben al menos 10 millones de dólares según lo que reflejaba su contrato, en el que se detallaba que él tendría derecho al 10% de los beneficios totales. Además, también obtendría un 6% de los ingresos de taquilla en Estados Unidos a partir de los 70 millones de dólares y un 12% de los ingresos en el resto del mundo a partir de los 35 millones.

Infravaloración de los ingresos

Tras contratar a un auditor, el actor descubrió ciertas irregularidades en las cuentas. Entre ellas, que la productora había infravalorado los ingresos de la película en los cines de Estados Unidos en 17,5 millones de dólares. También que la compañía han ocultado sin comunicárselo que 8 millones de dólares fueron a manos de los ejecutivos de la productora.

“Han ganado decenas de millones de dólares con Objetivo: La Casa Blanca, pero se niegan a pagar a Butler un centavo de los ingresos y beneficios que se le prometieron”, se recoge en la demanda. "Butler se niega a tolerar las tergiversaciones de los acusados y otras conductas ilícitas. Trabajó con los acusados para crear una franquicia cinematográfica muy exitosa y exige su parte", aseguran en el texto.

El actor y sus abogados han señalado, además, que la compañía también se dedujo el coste total de los gastos en publicidad en el mercado internacional cuando los distribuidores en dichos países corrieron con la mitad de los gastos.