Deva nunca ha necesitado una etiqueta para definirse. Desde que comenzó su camino en la música con una mezcla de R&B, hip hop y sensibilidad pop, ha preferido la evolución constante al encasillamiento. Su nuevo EP, En tercera persona, conformada por seis temas, la confirma como una narradora honesta y compleja, capaz de hablar de sí misma desde fuera, como si contara su historia con la distancia de quien se ha desprendido del ego. Con reflexiones crudas sobre el amor, la industria, el lenguaje y la creación, Deva se posiciona como una de las voces más lúcidas del panorama alternativo actual.

Asimismo, Deva ha sido seleccionada como una de Los 7 Inetiquetables de Jack Daniel’s, una iniciativa que celebra a los artistas que rompen moldes y rehúyen los clichés. En esta entrevista, hablamos con ella de su proceso creativo, del reto de ser una artista independiente, de los abusos silenciados en la música y de esa búsqueda constante de autenticidad que atraviesa su carrera.

Pregunta (P): ¿ Dónde está tu cabeza después de sacar En tercera persona?

Respuesta (R): Es siempre lo mismo, nunca llega a terminarse del todo. Ahora estoy pensando en qué voy a hacer ahora. 

P: ¿Algo en concreto?

R: Sí, tengo pensado sacar la mitad de un EP. Quiero decir más en mucho menos. Siempre estoy pensando en algo.

P: Siempre varías el sonido y la producción. ¿Lo siguiente será diferente a lo que hemos visto hasta ahora?

R: Sí, desde luego. Me he dado cuenta que está muy bien experimentar y que suelo hacer cosas muy diferentes entre sí, pero al final lo único que me importa es que la gente conecte conmigo y entiendan mi historia. 

P: Has trabajado con una cantidad de productores distintos como Carlos Ares o LOWLIGHT. ¿Buscas mucha diversidad en tus trabajos?

R: La verdad es que tengo una mentalidad bastante enfocada en mantenerme con la misma gente, especialmente con los que se que trabajan bien. Eso no quita para que piense que lo más interesante en la música es salir de mi zona de confort y vivir experiencias nuevas. Uno de los conceptos que más me ha llamado la atención últimamente es el de escribir en tercera persona. Me parece fascinante cómo puedes hacer de narradora sin ponerte necesariamente como protagonista, pero aun así sigues hablando de ti. Es como si hablaras de tu experiencia personal, pero desde otra perspectiva, conectando también con otras personas.

P: En En tercera persona tú eres la narradora sin ponerte como protagonista transversal, relatando la historia a través de otros. ¿Cómo surge esta idea? 

R: Nace de ser consciente de la batalla con el ego. Me estoy leyendo un libro que se llama El camino del arte que dice que cuando hablamos de las cosas que nos importan, tendemos a proyectarlas en terceras personas, especialmente para esquivar la culpa. En el álbum me planteo cuestiones como la monogamia o los sesgos sociales entre las mujeres y los hombres, cosas que a mí me preocupan y me llevan a pensar. Pero lo hago de una forma en la que me salgo de mi misma para contar mis historias y que no sea tan incómodo. 

P: ¿Cómo ha influido a la hora de hacer el EP? 

R: Me he vaciado muchísimo a la hora de escribir tantas ideas. El primer acercamiento al EP fue empezar a escribir un diario, algo que me ayudó a darme cuenta de que en el día a día vamos haciéndonos de hierro y dejando a un lado los sentimientos. Es la manera que encontramos de vivir la vida sin sufrir demasiado. Sin embargo, ahora estoy buscando volver a vivir ese proceso en el que volcar todo lo que lleve dentro. Tengo muchas cosas que decir.

P: Eso de que la música funciona como catarsis. 

R: Totalmente. Incluso aburrirse te puede llevarte a algún sitio. Personalmente, cuando todo va demasiado bien me agobio, como si faltara algo de intriga para poder volcarla en la música. 

P: Surges como artista de R&B y HipHop. ¿Cómo empiezas en el género?

R: Porque vengo de un pueblo muy pequeño en el que había poco que hacer. A través de Internet en mi casa me di cuenta de que había un mundo enorme ahí fuera. Así fui entrando. Además, mi padre es inglés, por lo que siempre he tenido referencias de música en ese idioma. Con respecto a la forma de cantar, ahora que estoy en una formación vocal me he enterado de que las personas que tenemos la vibración de una manera particular es porquenos hemos pasado la vida imitando a los artistas de los géneros que nos gustan, e inconscientemente la vamos desarrollando. Es lo que me ha ocurrido a mí con el R&B.

P:¿Encontrabas referentes mujeres que hicieran ese tipo de música en España?

R: En los últimos años me he dado cuenta de que busco más referencias para entender de dónde viene todo lo que hago, incluidas mis letras en castellano. Siempre me ha gustado escribir poesía, y literatura. Es de ahí donde realmente nace todo esto. Me gusta construir personajes, crear desde ahí. Hay algunas artistas que cantan en español, como Julieta Venegas o Cecilia, me han inspirado mucho, pero no he tenido muchos referentes dentro del Hip Hop. Durante mucho tiempo renegué de mis raíces, de mi pueblo. Lo típico: quieres irte fuera, aprender, vivir tu vida... como nos pasa a muchos. Pero ahora que soy más consciente, me doy cuenta de que hay millones de historias increíbles aquí mismo. Por otra parte, el pop internacional me ha inspirado mucho, especialmente artistas como Beyoncé.

P: Precisamente, el tema del EP de Si fuera un hombre parece estar inspirado en el If I were a boy de Beyoncé.

R: Me salió de forma genuina, pero luego pensé que inconscientemente había hecho mi propia versión del tema. Como si estuviera explorando una nueva faceta. Supongo que todas nos hacemos esa pregunta alguna vez. 

Hablamos entre nosotras aunque muchos hombres crean que no

P: En esta canción dices ‘No se posicionan con nada’, una frase que viene muy al caso de lo que vivimos actualmente en la industria musical. 

R: Hay personas a las que parece que la vida les pasa por delante. Muchas veces cuando alguien se porta mal contigo la respuesta de la gente es que pases página y que no te lo tomes demasiado personal. El problema es que para nosotras sí es personal, porque constantemente tenemos que estar defendiendo nuestra posición. Una falta de respeto es una falta de respeto, y quiero que no se dejen pasar. A mí concretamente me han pasado situaciones en la música que he dejado correr pensando que iba a perjudicarme en mi carrera. Ahora, con 25 años, me arrepiento. Pero los tiempos han cambiado, ahora tienes que posicionarte. 

P: ¿Se habla de esas situaciones dentro de la industria?

R: Sí. Algo que ha cambiado en ese sentido es que nosotras hablamos entre nosotras aunque muchos hombres crean que no. Estas cosas pasan. Ocurren abusos, faltas de respeto en el día a día, intentos de ligar contigo en un ambiente laboral. Ellos aún no se dan cuenta pero nosotras sí hablamos de todo lo que nos pasa en ese sentido. Existen grupos donde nos contamos las cosas. Pero cuando se lo cuentas a un compañero probablemente intente quitarle hierro. Lo importante es que nosotras sabemos todo lo que pasa, que se enteren.

P: ¿Hay que estar muy alerta como artista en este sentido?

R: Personalmente he decidido aislarme un poco en ese sentido porque hay cosas que nunca voy a entender. Intento rodearme de gente que sí hace las cosas bien. También me he dado cuenta de que yo puedo hacer justicia desde mi casa. Elijo a quién dejo de seguir y a quién no, a quién apoyo en sus proyectos y quien no se lo merece. He hecho mi propio contraste, decido lo que consumo y elijo cambiar las cosas desde mi perspectiva. A veces realmente me asusto con historias de compañeras de industria sobre personas concretas, porque hay gente que verdaderamente tiene ideas obsoletas. 

P:Defiendes que a la hora de hacer música hay que cuidar mucho el ambiente y procurar que todo sea positivo. ¿Cómo es tu proceso creativo en ese sentido?

R: Yo me paso el día viviendo en mi mundo. Pero aun así, todos los estímulos que me rodean son muy importantes y repercuten en mi estado de ánimo. Desde lo que ponga en la televisión hasta lo que escuche. Intento rodearme de personas que me hacen críticas constructivas. Críticas positivas no significan halagos vacíos. Hay una diferencia enorme entre decir las cosas con malas maneras y decirlas con respeto. Estoy aprendiendo a distinguir eso, sobre todo porque necesito cuidar mi proceso creativo. Por eso presto mucha atención a lo que consumo y a lo que escucho.

P: ¿Es esa la parte más importante a la hora de componer o hay otras cuestiones?

R: Hay un proceso basado en escribir todos tus sentimientos. Es un filtrado emocional. La música que consumo también es fundamental. Por mucho que yo quiera lograr un sonido específico, si he pasado toda la semana escuchando a artistas que hacen R&B o pop, no voy a llegar al estudio y hacer techno.Todo lo que consumes te influye, inevitablemente. Por eso siempre recomiendo escribirlo todo, como si llevaras un diario. Apuntar lo que te pasa, lo que sientes,  aunque sea una disculpa que no mandaste o algo que se quedó en el aire. Me interesa muchísimo: cómo mantenerte fiel a lo que sientes, aunque el entorno esté en otra frecuencia.

P: ¿Cómo es ser un artista independiente? 

R: Es un grano en el culo. Está guay, pero a veces se me olvida que todo lo que hago es para tener mi propio catálogo y ser dueña de mis obras porque en el pasado ya viví los estragos de no tener ese control. Se siente como si vivieras de alquiler toda la vida. Ahora estoy construyendo mi propia casa, poco a poco. Y sí eso implica sacrificarse, merece la pena. Definitivamente es duro, porque toda la parte de la promo y de la gestión recae en mí. Especialmente ahora, que soy DEVA sola con su proyecto contra el mundo. A veces me pregunto cómo lo hago. 

P: ¿Qué has aprendido de la industria y los circuitos musicales en estos 8 años?

R: He aprendido que ninguna regla está escrita y que los modelos de éxito no existen. A que lo que te da miedo seguramente es el próximo paso y que para atajar eso seguramente te tengas que lanzar. He aprendido que es importante trabajar en la relación personal con una misma y su entorno. En definitiva, hay que ser buena persona.

P: En 2020 sacaste tu primer álbum, Woman. ¿Qué diferencias encuentras ahora con el nuevo EP?

R: Mi primer álbum también siento que todo estaba muy hecho porque soy pues porque no tenía esos ocho años de carrera hasta ahora. Ahora no siento ese trabajo como algo mío. Me parece algo ajeno y que no me representa a día de hoy. Ni los conceptos ni las letras captan mi esencia y lo que soy, algo que En tercera persona sí hace. 

P: Es un proyecto que tuvo mucha relevancia. ¿Cómo se lleva que no te represente?

R:  Es como si hubiera una especie de buena suerte detrás de todo esto. Si no me equivoco, el álbum ya suma más de cinco millones de plays, que es una locura. A día de hoy todavía lo pienso y me da muchísima fortaleza. Me parece surrealista porque no es un trabajo que me represente. Sin embargo, ha funcionado. Eso me recuerda que estoy en el camino donde quiero estar y que me queda mucho por aprender y vivir.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio