
Guisantes con puerros al horno.
¿Con qué?
Doscientos gramos de guisantes, tres puerros, aceite de oliva, doscientos gramos de queso Provolone, una cebolleta, una copa de vino blanco, cien gramos de jamón serrano y sal.
¿Cómo?
Partimos el jamón serrano en tiras finas y cortamos los puerros en trozos de diez centímetros y los abrimos transversalmente, introducimos en ellos el queso en tiras y el jamón, salamos, colocamos en una fuente de horno, rociamos con unas gotas de aceite, echamos media copa de vino e introducimos en el horno a 160º C durante veinte minutos. Entretanto pochamos la cebolleta, cortada en dados, en un cazo con un poco de aceite y cuando esté blanda, echamos los guisantes, cubrimos de agua, salamos y dejamos que se hagan a fuego lento, diez minutos. Servimos puerro con guisantes guisados.

Lomo adobado al horno con patatas y cebolletas.
¿Con qué?
Un kilo de lomo adobado en una pieza, tres patatas, dos cebolletas, aceite de maíz, tomillo, una copa de vino oloroso y sal.
¿Cómo?
Este es un plato que necesita poca elaboración, sobre todo, si el producto es bueno. Colocamos en una fuente de horno las cebolletas partidas en tiras y las patatas, peladas y cortadas de igual forma, aceitamos y salamos un poco, ponemos encima la cinta adobada, rociamos con aceite, espolvoreamos un poco de tomillo, vertemos un poco de vino oloroso y metemos en el horno a 200º C durante veinte minutos, dándole la vuelta a la carne a los diez, bajamos la temperatura a 160º y dejamos asar veinticinco minutos más, cuidando que este jugoso. Apagamos, reposa cinco minutos y servimos rodajas de lomo con patatas y cebolleta.
Fruta del tiempo.
El coste de esta propuesta es de unos 18 euros.