Juncker, líder del Partido Popular Socialcristiano de Luxemburgo, intentó probablemente, con sus palabras, suavizar la alusión suya en torno a Grecia, entre otras razones para tranquilizar al Gobierno y a los ciudadanos de España. Pero no olvidemos que, a pesar del optimismo aparente de Rajoy y de su Gobierno, el panorama bancario español es pavoroso, máxime a raíz del escándalo o desastre de Bankia.

El rey del mambo
Convendría que Rajoy tuviera en cuenta –ahora que se cree una vez más el rey del mambo- que por mucho que él se empeñe, el vocablo rescate no tiene demasiados seudónimos, aunque podría emplearse también la palabra redención, todavía más solemne por sus tintes religiosos.

Vírgenes, santos y Dios Padre
Ahora que militantes populares, como la ministra Bañez, el alcalde de Sevilla y la inefable Botella, alcaldesa de Madrid, se dedican a rezar a vírgenes, santos e incluso hasta a Dios Padre, pidiéndoles que acaben pronto con la crisis, el presidente del Ejecutivo debería desacomplejarse en relación con el rescate bancario. ¿Pero por qué tiene tanta alergia Rajoy a ese término? No hay otra respuesta que su temor a que el rescate termine con él.

El dueño fáctico
Bankia, sin embargo, no es en absoluto una herencia de Zapatero. Desde 1996/7 hasta la actualidad, el control primero de Caja Madrid y más tarde de Bankia circuló en idéntica orientación política. Es decir, que ha sido el PP -y sigue siéndolo- el dueño fáctico de la que era considerada como la cuarta o quinta entidad bancaria de España. En estos tiempos, la sombra de Rajoy ha sido sistemática e innegable.

Banco nacionalizado
Fue él –durante otro subidón de optimismo- el que hizo y deshizo hasta cargarse políticamente a su antiguo compañero de Gobierno, de partido y de sucesión, Rodrigo Rato. Rajoy apostó por un banco nacionalizado, que pagaba el Gobierno, después de haberse negado a ponerlo en marcha.

Unas cuantas ambulancias
Y ahora han tenido que actuar unas cuantas ambulancias para evitar la muerte de Bankia. Francamente, sería una medida muy sensata que desde la UE le rescataran a Vd., don Mariano. Como presidente es todo un peligro por su frivolidad, su falta de rigor, su tendencia al engaño, su conservadurismo reaccionario y su torpeza irrefrenable.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM