En I Care A Lot, el nuevo thriller del guionista y director J Blakeson, Marla Grayson (Rosamund Pike) es una glamurosa villana, aparentemente educada y respetable. Una estafadora especializada en robarle a los ancianos los ahorros de su vida a partir de un macabro entramado que ha tejido con la complicidad de un médico que los incapacita, un director de residencia que le vende información confidencial, el favor de un juez que le concede a ella la tutoría legal de esos mayores, y una mansión que Grayson se ha construido a base de engaños.

En clave de comedia negra, esta trama sirve de metáfora al abuso que sufren las personas mayores en la sociedad, y entra de lleno en el debate sobre la incapacitación y sus lagunas legales. En ella, Jennifer Peterson (Dianne Wiest) podría parecer una víctima fácil: tiene dinero y no tiene familiares cercanos. Sin embargo, el hijo de Jennifer es el jefe del crimen Roman Lunyov (Peter Dinklage), y como cualquier magnate del crimen, quiere y cuida a su madre.

"Hay dos tipos de personas en este mundo", dice el personaje protagonista en el incio de la cinta: “Los depredadores y las presas. Los leones y los corderos ". Como El lobo de Wall Street, este es un retrato de la sociopatía a la que puede conducir la codicia capitalista, que busca el enriquecimiento aun a costa del bienestar y la vida de otros. Es también una parábola sobre el poder, sobre las resistencias que se han creado en las relaciones sociales para hacer retroceder a las mujeres y sobre la fascinación que causan aquellas que son capaces de revertirlas, independientemente de su ética personal.