Los defensores de la igualdad y el reparto equitativo de las tareas domésticas tienen nuevos argumentos para demostrar que lo estamos haciendo mal en general. Un estudio demuestra que los padres se relajan en su ayuda familiar pasados solo tres meses. Es decir, pasados tres meses desde el nacimiento de su primer hijo, y una vez que padre y madre vuelven al trabajo, los padres se relajan más y cargan la responsabilidad en las madres del cuidado de los niños y las tareas domésticas.

Cuando los hombres estaban en casa haciendo las tareas, las madres también ayudaban

La estadística es reveladora: Las mujeres pasaron solo entre 46 y 49 minutos de descanso mientras que los hombres cuidaban de los niños o trabajaban en la casa en su día libre. Los hombres dedicaban alrededor del doble de tiempo en el ocio -unos 101 minutos- mientras sus compañeras hacían algún tipo de trabajo doméstico. La investigación de la Universidad de Ohio incluyó a 52 parejas que participaron en el New Parents Project, un estudio del Estado, con la mayoría de las parejas altamente educadas, de raza blanca, con dobles ingresos, en el área de Columbus y que estaban teniendo su primer hijo. Los investigadores pidieron a las parejas que completaran sus propios diarios del tiempo dedicado un día de trabajo y un día sin trabajo, durante el tercer trimestre del embarazo de la mujer y unos tres meses después del nacimiento del bebé. Según mostraron los resultados, en los días laborables después del nacimiento del bebé, la cantidad de tiempo que las mujeres y los hombres pasaban haciendo tareas domésticas y cuidado de niños era más igual que en días no laborales, aunque las mujeres todavía hacían un poco más de trabajo. Pero los hombres compensaban los días laborables, cuando la cantidad de tiempo que pasaban en actividades de ocio realmente se duplicaba, de 47 a 101 minutos, entre el momento en que su pareja estaba embarazada y tres meses después del parto.
En días no laborables, los padres dividen más el trabajo de casa y el cuidado de los niños, pero cuando hay más tiempo disponible el fin de semana y los padres no están tan presionados para hacer todo, entonces vemos la aparición de los patrones de género y la desigualdad cuando las mujeres hacen mucho más trabajo doméstico y cuidado de los niños.
En sus días libres, los hombres se relajaban el 46 por ciento del tiempo mientras sus parejas cuidaban de los niños. Por el contrario, las mujeres se dedicaban al ocio sólo el 16 por ciento del tiempo cuando sus parejas estaban cuidando a su hijo. Los resultados fueron similares para el trabajo de casa, donde los padres tomaron el 35 por ciento del tiempo libre, mientras que su pareja hizo tareas como la limpieza. Las mujeres tomaban el 19 por ciento del tiempo libre cuando los hombres hacían las tareas domésticas.
Lo decepcionante del estudio, según sus investigadores, es que esperaban que en parejas con alto nivel de estudios y nivel económico, estas diferenecias hubieran desaparecido o fueran menos acusadas.
Referencia: The Ohio State University